A partir del lunes sólo se detendrán cuatro horas al día.
Si no bastaba con las campañas en contra de Benedicto XVI, se producen nuevos intentos para evitar la llegada de personas a la misa del día 7 en Barcelona.
El comité de empresa de Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña ha convocado una huelga para el domingo 7 de noviembre, vaya coincidencia, el día que Benedicto XVI visita Barcelona. Los Ferrocarriles conectan a las zonas del interior de la provincia o de la costa con la Ciudad Condal, de manera que muchas personas se verán dificultadas para poder acudir a la misa en la Sagrada Familia.
Aunque seguramente esto sucede porque pienso mal y todo ha sido una mera coincidencia, no había ninguna intención detrás. Eso sí, el lunes, después de una huelga de 24 horas, los paros serán de 7 a 9 de la mañana y de 18 a 20.
Juan María Piñero
juanmaria@hispanidad.com
