• Pero el exgobernador reparte a diestra y siniestra: "El problema bancario español se engendró durante los años de expansión desmesurada", "a mediados de los años noventa" y "se desarrolló durante las dos legislaturas del PP y la primera del PSOE".
  • Y se acuerda de su antecesor Caruana: durante su gestión, "la política económica y prudencial debió haberse orientado a no contraer la enfermedad".
  • MAFO denuncia una "campaña sin fundamento" contra el supervisor por la nacionalización de Bankia: "La supervisión ha cumplido bien con su tarea en un periodo excepcional".
  • José Manuel Campa dice que la salida a Bolsa de Bankia contribuyó a bajar la prima de riesgo. El exsecretario de Estado de Economía defiende que la restructuración financiera que se ha hecho es "la correcta". 
Comienzan las comparecencias en el Congreso de los que tienen algo que decir sobre la crisis financiera en este país. Por la Comisión de Economía van a pasar desde el ex presidente de Bankia, Rodrigo Rato, hasta los exministros socialistas de Economía, Pedro Solbes y Elena Salgado; el actual ministro, Luis de Guindos; el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, y su predecesor, José Manuel Campa; así como el actual gobernador del Banco de España, Luis María Linde, y el anterior responsable de la institución, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, junto con su subgobernador, Javier Aríztegui. También se pedirá la comparecencia del presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Julio Segura, y su vicepresidente, Fernando Restoy.

Pues bien: este viernes ha sido el turno del exsecretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, y del ex gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez.

Este último ha asumido que antes y durante la crisis "se han hecho mal muchas cosas" y ha echado en falta otras que "se deberían haber hecho fundamentalmente para la resolución del problema bancario" para arreglar la situación del sector financiero español. En este sentido, Fernández Ordóñez admitió "errores de supervisión"; y en la reforma de las cajas de ahorros, afirmó que el proceso de reestructuración del sector se hizo en un periodo más prolongado que en otros países del entorno para minimizar el uso de fondos públicos.

MAFO ha sostenido que "hasta finales de 2011 los indicadores de confianza en España y en su sistema bancario se mantenían en unos niveles relativos alejados de la amenaza del rescate". Pero -hete aquí-, tras la llegada de Rajoy al poder, "a lo largo del primer semestre de este año hemos sido testigos de un proceso de hundimiento de la confianza en España y en su sistema financiero llegando a niveles que eran inimaginables hace siete meses". "España, que en diciembre pasado estaba situada junto a Bélgica entre los dos países con mejor prima de riesgo de los seis que estaban bajo sospecha, está hoy situada en el grupo de los tres peores, con Grecia y Portugal".

No obstante, en su opinión, "la actual situación española es tan delicada que no es capaz de soportar las tensiones habituales en el juego político en situaciones normales (...) Los problemas son tan graves, llevan tanto tiempo acumulándose y afectan a tal número de ciudadanos e instituciones, que cualquier tensión adicional aumenta la desconfianza". "Resulta contraproducente buscar chivos expiatorios a los que endosar todas las responsabilidades, porque, como he mostrado, no los hay".

Pero, a renglón seguido, patadón al PP: "El problema bancario español se engendró durante los años de expansión desmesurada en los que se produjo un aumento extraordinario del crédito y del endeudamiento privado así como la pérdida sistemática de competitividad en relación con los países de la zona euro, lo que generó un déficit corriente sistemático que tuvo que ser financiado con deuda externa. Este proceso arrancó a mediados de los años noventa y se desarrolló durante las dos legislaturas del PP y la primera del Partido Socialista". "Estos fueron los años de la alegría, de la exuberancia irracional", a su juicio.

Y patadón también a su antecesor en el cargo, Jaime Caruana, porque -antes de la gestión de MAFO- "la política económica y prudencial debió haberse orientado a no contraer la enfermedad". Además, ha denunciado una "campaña sin fundamento" contra el supervisor por la nacionalización de Bankia: "La supervisión ha cumplido bien con su tarea en un periodo excepcional".

También se ha referido a Bankia durante su comparecencia esta mañana en la Comisión de Economía el exsecretario de Estado de Economía, José Manuel Campa. Y, pese al desastre de Bankia, el exsecretario de Estado de Economía con ZP -desde mayo de 2009 hasta diciembre de 2011- ha defendido la salida a Bolsa de la entidad, pues era un "proyecto atractivo", y porque -atención- contribuyó a rebajar la prima de riesgo española mientras la de los países "vulnerables" subía. Hoy, con la prima de riesgo muy por encima de los 600 puntos, una subida inexplicable pero que algunos analistas la cimentan en la crisis financiera española, esas declaraciones chocan un poco.

Campa ha añadido: "No hay que minusvalorar el impacto de la salida a Bolsa de Bankia". Y ha recordado que  la entidad ahora nacionalizada ya tenía "necesidades" de capital "importantes" tras el decreto de febrero de 2011.
 
En cuanto a las preferentes, el exsecretario de Estado las contextualizó en la necesidad de las cajas de seguir creciendo y ante su incapacidad de ampliar capital: "Desde 2008 se dejan de emitir preferentes en red minorista, sólo las emite el FROB".

También ha recordado que el Gobierno excluyó las preferentes como capital de calidad y calculó que el saldo vivo ha pasado de 25.000 millones en 2008 a menos de 8.000 millones. "Desde julio de 2009 no se han emitido casi preferentes en mercado minorista, sólo se han amortizado". Y mientras, y bajo el argumento de que las entidades 'necesitaban capital', miles de personas atrapadas por las preferentes...

Igualmente, aunque ha admitido que antes y después de la crisis se han cometido "errores y excesos" por parte de los actores del sector financiero, choca que Campa diga que la reestructuración financiera que se ha hecho es "la correcta": "No hay que confundir los errores cometidos con una equivocación en la dirección de la reestructuración financiera, que es y era la correcta". Y para colmo, añade: "El sistema financiero tenía capacidad para absorber el deterioro de los activos". A juzgar por los 100.000 millones de euros para sanearlo que nos va a prestar -con intereses- Europa, mucha capacidad no tenía...

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com