De nada ha servido la llamada la orden desde Génova: la presidenta madrileña está más crecida que nunca y apuesta por la solución ‘española', es decir, italiana, para la eléctrica. Miguel Blesa obtiene el visto bueno de Rajoy para seguir hasta el 2009, por no las tiene todas consigo. El asunto no es baladí, por cuanto Rajoy quiere que se de la batalla Conthe en el Congreso. Y por si fuera poco, Gallardón chantajea a Rajoy con el partido bisagra

El PP parece una jaula de grillos, aunque todo el mundo pide tranquilidad hasta las elecciones, La anécdota del jetas de Joaquín Calomarde, que renuncia al partido pero no al escaño, es moco de pavo comparado con la que se puede armar en Madrid, a pesar de que es la plaza fuerte del PP. El motivo: las ambiciones del alcalde Gallardón y de la presidenta Aguirre: ambos quieren ser líderes del PP y candidatos a la Moncloa. El campo de batalla: Endesa y Caja Madrid.

Lo más importante es que José Manuel Entrecanales, amigo personal de los hermanos Aguirre, se ha ganado para sí a la presidenta madrileña de la Comunidad. Aguirre insiste en lo que ella lama la solución "española", es decir, la de ENEL-Acciona, a pesar de que en menos de tres años será totalmente italiana, propiedad de una empresa estatal.

Y eso que desde Génova se le ha advertido, reiteradamente, que los Entrecanales son la opción del Gobierno socialista y que, además, Mariano Rajoy quiere dar la batalla en el caso Conthe, porque considera que ZP ha dado aquí una muestra de intervencionismo vulgar y de desprecio hacia los reguladores independientes.

Las malas artes de ZP se están dejando ver, y el Presidente del Gobierno incluso tiene problemas para actuar según en qué ámbitos sociales. Sin embargo, Aguirre quiere dejar claro que es un peso pesado en el Partido Popular y que debe ser la primera mujer en aspirar a la Presidencia del Gobierno español.

Recordemos que Aguirre es la clave en Caja Madrid, presidida por Miguel Blesa y propietaria de casi el 10% de Endesa. Aguirre insiste en que Blesa apoye a los Entrecanales (la verdad es que lo más probable es que se vea obligado a apoyarles, dado cómo están las cosas) y Blesa ha pedido árnica a Génova. Por de pronto, en la sede del PP le han pedido a Aguirre que deje en paz a Blesa tras las elecciones del 27 de mayo y que le permite cumplir su mandato sin intromisiones, mandato que culmina el 2009 (aún puede repetir hasta 2015).

Siempre que desde Génova le recuerdan a Aguirre que los presidentes regionales deben colaborar con el partido, Aguirre responde que el único traidor digno de tal nombre es el alcalde de Madrid, Ruiz Gallardón. Para la presidenta madrileña, Gallardón chantajea a Rajoy de la siguiente forma: si no le acepta como número dos en las elecciones de 2008, y como previsible sucesor en el partido, Gallardón formará un partido de centro, una bisagra, con su amigo José Bono. Hoy mismo (ver sección de Radio y TV de Hispanidad) el democristiano Duran i Lleida, insistía en esa opción.