El incremento del salario mínimo en España va a permitir que los españoles puedan cubrir el café del tarifazo eléctrico del ministro Sebastián, y poco más.
El Gobierno ha aprobado en el último Consejo de Ministros del año que el salario mínimo aumente un 1,3%, un 0,3% más de lo que habían anunciado a los sindicatos -¡qué bondad la suya!-, por lo que se quedará en los 641 euros al mes, ocho euros más del salario mínimo actual. Desde ahora se podrá decir que los españoles somos ahora un poco más ricos (pero muy poco). Poco porque si se compara con el salario mínimo que se percibe en otros países de la Unión Europea, la diferencia es brutal, como pueden ver en esta lista: 1.300 euros en Holanda, 1.600 en Luxemburgo, 1.350 en Francia o 1.440 en Bélgica.
Eso sí, cada uno de los ciudadanos va a valorar mucho el esfuerzo realizado desde el Ejecutivo. Y es que, como ha dicho el presidente Zapatero, esta enconada lucha es seña de identidad del Gobierno, que en época de crisis continúa aplicando medidas sociales. Además, este dato habla por sí sólo de la sensibilidad y el esfuerzo que realiza este Gobierno en favor de las personas más débiles. No se puede negar que es todo un detalle que nosotros, ¡oh ingratos!, no sabemos reconocerle.
Pero bueno, basta de pesimismo, que podrían haber dejado el salario mínimo como estaba y no hubiéramos tenido ni para el café del ministro Sebastián.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com
