Sr. Director:

Cuando se pusieron en marcha las nuevas técnicas en producción animal se llegó a la conclusión de que no era necesario castrar a los cerdos machos, pues llegaban al matadero con una edad en la que aún, en general, eran pre púberes, además, el crecimiento era superior en animales enteros que en los castrados.

Con el paso del tiempo se empezó a exigir la castración, puesto que la carne de algunos animales machos podía reproducir sabor y/o olor sexual a verraco. Prácticamente los mismos que exigían la castración por el olor, hoy la prohíben por razón de bienestar de los animales, ¡pobres¡ hacerles sufrir. Claro que tampoco quieren la carne de los cerdos enteros, por el olor.

¿Qué hacer? Habrá que buscar métodos incruentos o genéticos. En este contexto, investigadores de la Universidad de Guelph (Canadá), con el apoyo de representantes de la mayoría de los mataderos canadienses y una empresa de genética del Reino Unido están llevando a cabo una investigación para buscar soluciones al sabor y olor sexual de la carne de cerdos machos no castrados. El objetivo es eliminarlo a través de selección genética, para lo que es necesario identificar marcadores de los genes responsables de la producción de androsterona y escatol. La primera es una feromona coproducida con la testosterona (hormona sexual) y utilizada para atraer a las hembras. El escatol no tiene finalidad sexual y se encuentra tanto en hembras como en machos castrados, pero en cantidades medias.

Hasta ahora, el sistema que se viene utilizando es castrar a los lechones, para que de esta manera no produzcan estas sustancias. Como hemos comentado, una mayor concienciación sobre el bienestar animal está llevando a buscar otras vías de solución de este problema.

Los científicos estudian una doble vía para reducir los niveles de los compuestos que provocan el sabor y el olor sexual. Primero reduciendo su síntesis y luego aumentando su metabolismo. Hasta el momento, los investigadores han identificado 140 marcadores de ADN en más de 30 genes. Se están llevando a cabo análisis, tanto en la cohorte y animales de las líneas comerciales, con el fin de establecer aquéllas que son más efectivas. Con el tiempo tendremos la solución. Pero si soy porcicultor ¿que hago hasta entonces?

Domingo Martínez Madrid

domingo121@gmail.com