Según el INE, el ladrillo no termina de repuntar. El recorte en el mes de mayo es del 32%. Menos que en el mes anterior, pero recorte severo en las compra/ventas. ¿Por qué está frenado el mercado? En primer lugar porque las entidades financieras han cerrado el grifo de la financiación. Pero en segundo lugar, porque muchos posibles compradores están esperando a que el mercado ajuste todavía más. Actúan racionalmente porque cada día que pasa el precio baja.
Así que hasta que no llegue a su suelo no se reactivará el mercado. Y eso significa ajustes mucho más severos del 30-35% según diversos estudios. Tipo default argentino o recorte drástico de Florida. Pero lo que no puede ser es que el mercado siga sin ajustar. Hasta que eso no se produzca, no habrá recuperación en las ventas, en la producción y liquidación del voluminoso stock de los bancos. La pelota está en el tejado de quien se empeña en aguantar lo inaguantable. El G14, por ejemplo.