La asociación PROFESIONALES POR LA ÉTICA afirma que el Proyecto de Ley de Investigación Biomédica que se votará hoy en el Congreso de los Diputados no protege en absoluto la vida humana sino que abre la posibilidad a la práctica legal de actos y acciones contrarias a la dignidad del ser humano como la clonación.

José Agudo, Responsable del Área de Bioética de Profesionales por la Ética, ha manifestado que el Proyecto de Ley determina que hasta el día decimocuarto de embarazo el producto de la fecundación recibe el nombre de preembrión. Cabe recordar que el término preembrión, no tiene fundamento científico ni antropológico; desde el mismo momento de la fecundación nos hallamos ante un ser humano que es conocido con el término de embrión y que debe ser protegido y respetado. «El Proyecto legislativo», ha asegurado Agudo, «está en la misma línea que la reforma de la Ley de Reproducción Asistida impulsada por el Gobierno y desprotege absolutamente al embrión, convirtiéndolo de nuevo en objeto de experimentación o destrucción. En suma, se está instaurando un nuevo orden en el que las principales víctimas serán los más débiles (los no nacidos); esta concepción de la ciencia afecta también a la sociedad entera, que asiste indiferente a la quiebra del valor más importante, el de la vida humana. Lógicamente, se trata también de un gran negocio en el que la destrucción de seres humanos proporciona enormes beneficios económicos».

Agudo ha recordado que el Proyecto de Ley prohíbe la creación de embriones destinados a la investigación. Pero, a la vez, autoriza la llamada activación de ovocitos por transferencia nuclear. La finalidad de esa técnica es la obtención de células madre embrionarias como material de investigación, para lo cual, se trata de obtener la producción de embriones clónicos como fuente de abastecimiento de tales células. En definitiva, el Proyecto autoriza en un apartado lo que esta prohibiendo en otro.

Profesionales por la Ética denuncia igualmente que el proyecto legislativo abre la puerta a la clonación terapéutica, es decir a la reproducción de seres humanos que serán destruidos antes de que culminen su desarrollo. «En este sentido», recuerda Agudo, «la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó en su sesión plenaria del pasado 8 de marzo de 2005 la Declaración de las Naciones Unidas sobre la clonación humana. En ella se prohíbe expresamente la clonación en cualquiera de sus modalidades (terapéutica o reproductiva), y se obliga en consecuencia a los Estados miembros (como España) a establecer su prohibición».

José Agudo, ha afirmado «que la posición de Profesionales por la Ética ha sido, es y será a favor de los avances científicos, pero éstos nunca pueden ser a costa de la eliminación de seres humanos, aunque no hayan nacido. Progreso científico SÍ, pero NO a cualquier precio».

Profesionales por la Ética reivindica, por otra parte, una regulación adecuada para la investigación con células madre adultas, con las que, a diferencia de las embrionarias, ya se han obtenido éxitos notables en la curación de diversas enfermedades, sin comprometer en modo alguno la dignidad del ser humano. «Es necesario», ha asegurado Agudo, potenciar firme y decididamente «el uso de células madre adultas frente a las células madre embrionarias ya que no suponen un dilema ético y son las únicas que han logrado curar enfermedades hasta el momento».

Profesionales por la Ética

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