La Conselleria dEducació de la Generalitat de Cataluña ha afirmado, tal vez para justificar las antidemocráticas medidas emprendidas por el Departamento, que casi el 90 por cierto de las familias han podido matricular a los hijos en la opción demandada. Esta afirmación, es muy preocupante, puesto que quiere decir que cerca de diez mil familias en Cataluña no pueden llevar a sus hijos al centro educativo que prefieren para ellos. Si a estas familias añadimos aquellas que han pedido en primera opción la que pensaban tendrían más posibilidades poniendo en segundo lugar o tercer lugar la que realmente deseaban, por miedo a no obtener la primera ni la segunda opción.
¿No les parece que en un país auténticamente democrático ha de ser antes la voluntad de los padres que la planificación de la Administración? Con la zonificación, aunque se les haga la boca agua hablando de democracia, el tripartito catalán nos está imponiendo sistemas antidemocráticos al tiempo que provocan restricciones mentales en los ciudadanos.
Enric Barrull Casals
