El PSC en Cataluña trató de forzar una declaración conjunta del Parlament sobre el Estatut, pero finalmente votó junto al PSOE en Madrid rompiendo la unidad de las fuerzas catalanas. El diputado de IU-ICV, Joan Herrera, se lo echa en cara. Pero también le pregunta a Chaves si la sentencia es un punto final en la carrera de la descentralización política. El vicepresidente tercero responde que el punto de partida es el bloque de constitucionalidad, pero que también está la voluntad política de impulsar el proceso. La sentencia del TC no cuestiona esa voluntad política sino que la respeta; lo que supone es un punto final de una visión centralista del Estado defendida desde la derecha.
Herrera responde acusando al TC de involucionista y de que el Gobierno ha tirado la toalla y ya no quiere liderar. Así que ante la acusación, Chaves responde que la voluntad polítoica del gobierno es el compromiso de desarrollar el Estatut. O como diría De la Vega: recuperar el Estatut de aquello que ha sido tachado por el Alto Tribunal. Muy fuerte.