Fotocopias concluidas: la acusación presentará en 30 días sus conclusiones y se abrirá el juicio, que coincidirá con el de las indemnizaciones de Amusátegui y Corcóstegui
El presidente del Santander Central Hispano (SCH), Emilio Botín, atraviesa su experiencia más amarga: la judicial. Por fin,
Y todo ello podría ocurrir al final del presente año o a primeros de 2005. Es decir, las mismas fechas en las que se supone que se le acusará, en su segundo reto judicial, de apropiación indebida, debido a las indemnizaciones pagadas por el SHC al ex presidente José María Amusátegui (44 millones de euros) y al ex consejero delegado, Ángel Corcóstegui (108 millones de euros). En este caso, si la condena fuera por apropiación indebida, a Botín podría costarle una sentencia de 8 años de cárcel, que se rebajaría a 4 años de prisión en el caso de que
En el caso de las cesiones de crédito, el problema de Botín es que el delito fiscal es autónomo, no continuado. Eso significa que cada delito tiene entidad jurídica y penal. Y recordemos que se le acusa de 38 delitos fiscales. Es verdad que cuando se dicte sentencia, Botín habrá cumplido los 70 años. No es habitual que a los 70 años se decida el ingreso en prisión, pero tampoco es preceptivo: depende del juez.
Además, se ha producido un cambio significativo en el caso de las cesiones, algo que indica que la actitud del Ministerio Fiscal puede haber cambiado. Así, en un juicio por cesiones de crédito contra la familia propietaria de Pikolín, seguido en Zaragoza, tanto el fiscal como el abogado del Estado calificaron los hechos como delito y el acusado (en este caso el suscriptor, no el intermediario, de las cesiones de crédito) fue calificado como delincuente por el fiscal y condenado por el juez. Más problemas. En
Y más. Los acusadores son la Asociación en Defensa del Accionista e Iniciativa per Catalunya (IC). Se suponía que cuando los comunistas catalanes de Joan Saura entraron en el Gobierno dejarían a un lado el caso de las cesiones y dejarían tranquilo a Botín. No ha sido así.
Pintan bastos para el banquero más importante de España. Ahora, la familia Botín plantea la posibilidad de acelerar el relevo de Emilio Botín por Ana Patricia. Eso sí, son muchos los consejeros que se animan a capitanear una etapa de transición, como Francisco Luzón, pero su opción puede resultar no especialmente deseada.