Sr. Director:
Escribo como padre que me beneficio de las ayudas para libros de la Comunidad de Madrid.

Tengo que decir que, en principio, estoy de acuerdo con el autor del mensaje, aunque quisiera ir más allá. Los libros no son gratis. Evidentemente tienen un coste de elaboración y, dentro de un negocio honesto, su venta debe generar un beneficio razonable, con lo que se les pone un precio de mercado, que debe ser pagado por quien quiere beneficiarse de su adquisición.

Los libros no son gratis. La Comunidad de Madrid (y otras) lo que hacen es sacarnos el dinero del bolsillo en forma de impuestos y devolvernos una pequeña parte en forma de ayuda de libros.

Por supuesto hay 2 precisiones: que la mano en el bolsillo nos la meten a todos tengamos hijos o no, y que lo que te devuelven siempre es menos que lo que te quitan, porque hay que pagar un número increíble de funcionarios, y porque a nadie le preocupa la rentabilidad o eficiencia del sistema.

Los libros no son gratis. Yo, que me beneficio, preferiría que no me dieran las ayudas, que no me metieran (tanto) la mano en el bolsillo, que los libros de texto que no varían su contenido de un año para otro pudiesen heredarlos mis hijos de un año para otro, que los ejercicios, dibujos y recortes no se hagan en el libro, sino en un cuaderno de trabajo que se pueda comprar por separado.

Pero es que a la presidenta de la Comunidad de Madrid, que se autoproclama liberal, le interesa mucho esta medida soviética de comprar tu adhesión inquebrantable regalándote lo que te acaba de sustraer.

Eduardo Méndez

e_mendez_polo@yahoo.es