• En vísperas del cierre de canales, reduce a la décima parte (del 2% al 0,2%) la audiencia de la eucaristía diaria, que retransmite la cadena de los obispos.
  • Y con ello, rebaja de sopetón la audiencia del conjunto de su programación.
  • El martes se fundirán a negro nueve canales: tres de Atresmedia (Nitro, Xplora y LaSexta3), dos de Mediaset (Siete y Nueve), dos de Net TV y dos de Unidad Editorial.
  • Los grupos que presiden José Manuel Lara y Silvio Berlusconi han lanzado anuncios culpando al Gobierno, que sólo cumple una sentencia del Tribunal Supremo.
  • Mientras RTVE tiene un agujero de 800 millones de euros y ya se plantea la vuelta de la publicidad al ente público.

El panorama audiovisual español anda especialmente movido en las últimas semanas por el cierre de nueve canales de la TDT el próximo 6 de mayo, en el que el Duopolio, es decir, Antena3-La Sexta y Telecinco-Cuatro, se verán bastante afectadas, pues su pluralismo de la telemierda pierde cinco canales. Por ello no se han quedado con los brazos cruzados, sino que como 'controlan' en gran medida a la independiente Kantar Media, han hecho que esta fuerce a la baja la audiencia de 13 TV.

La empresa de medición ha reducido a la décima parte la audiencia de la eucaristía diaria, es decir, ha disminuido del 2% al 0,2% la misa que retransmite la cadena de los obispos. Y de esta manera, ha rebajado de sopetón y sin ton ni son, bueno sí 'defender' a Atresmedia y a Mediaset, la audiencia del conjunto de la programación de 13 TV.

Como ya se ha dicho, el motivo es que este próximo martes se fundirán a negro nueve canales: tres de Atresmedia (Nitro, Xplora y LaSexta3), dos de Mediaset (Siete y Nueve), dos de Net TV y dos de Unidad Editorial. Este apagón digital ha provocado que los grupos mediáticos del Duopolio, presididos por José Manuel Lara y Silvio Berlusconi, hayan lanzado una serie de anuncios culpando al Gobierno. Sin embargo, el Ejecutivo que lidera Mariano Rajoy (en la imagen), sólo cumple una sentencia del Tribunal Supremo.

Por otro lado, RTVE afronta una delicadísima situación financiera, pues tiene un agujero de 800 millones de euros, según señaló el periódico El Mundo el pasado domingo. Esto podría provocar toda una serie de acontecimientos, como un nuevo crédito extraordinario por parte del Estado de 120 millones de euros para evitar su disolución y se podría forzar la destitución de su presidente, Leopoldo González-Echenique, y del consejo de administración. Además de todo esto, se puede plantear la vuelta de la publicidad al ente público, que se retiró en el año 2009, pero en vez de los 450 millones de euros perdidos sólo volverían 300 millones.

Pero RTVE también siembra discordia dentro del PP, donde la secretaria general, Mª Dolores de Cospedal, es partidaria de destituir a González-Echenique, mientras que la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría se opone, pues es abogado del Estado como ella y compañero de promoción de su marido, Iván Rosa.

Así que Rajoy tiene una doble patata caliente en sus manos, pues por un lado debe lidiar con el Duopolio y por otro, con Cospedal y Sáenz de Santamaría.

Cristina Martín

cristina@hispanidad.com