La presidenta de baleares no está sola en su ataque a la propiedad privada en materia de vivienda. La acompaña la alcaldesa de Barcelona.

Recientemente Francina Armengol perpetraba el primer ataque directo contra la propiedad privada desde la expropiación de Rumasa: 56 pisos embargados para darlos en alquiler social. Al parecer a Francina quien sostiene: "No expropiamos viviendas, las cogemos durante siete años"... no le ha salido bien su iniciativa y ha terminado haciendo una 'chapuza'. Y es que, casi la mitad de los pisos expropiados en Menorca son ilegales y estaban vacíos por obras.

Pero, ya lo decíamos al principio, Francina no está sola en su ataque a la propiedad privada, la acompaña Inmaculada -Colau-, a quien le ha ocurrido algo parecido en su intento de expropiación de viviendas.

Según publica El Mundo, el Ayuntamiento de Barcelona hizo bandera de la expropiación. El pasado mes de julio, c amenazó con la cesión forzosa de 194 pisos vacíos de grandes tenedores para incorporarlos al parque público de vivienda.

Si después de más de dos años vacíos, en un mes los inmuebles no habían sido puestos en alquiler, el Consistorio expropiaría su dominio, prometió. Es decir, se quedaría con el piso abonando al propietario el 50% de su valor de tasación.

Ocho meses después de la amenaza lanzada por Colau, el  consistorio barcelonés no ha logrado expropiar ni uno solo de esos 194 inmuebles con los que prometía paliar la endémica falta de vivienda social en la ciudad. Tras enviar los pertinentes requerimientos a los 14 propietarios que amasaban esos casi 200 pisos, detectó que "la gran mayoría ya se habían movilizado o se provocó que se movilizasen", según confirman fuentes del Gabinete de Barcelona a El Mundo. Se basó el Consistorio en un registro de pisos vacíos de la Generalitat que se ha demostrado inexacto e ineficaz.

Francina e Inmaculada: dos marxistas, dos 'chapuzas'.