- Y alaba la gestión de Restoy, con el que ha tenido bastantes encontronazos durante la crisis bancaria.
- Pone a los socialistas en primer lugar, por detrás de Ciudadanos, para negociar la renovación.
- Manda la "tradición" para repartirse la cúpula del Banco de España.
- Otra cosa es la presión de Rivera, que frenó al PP para la continuidad de Elvira Rodríguez en la CNMV.
- Guindos trasmite a Bruselas que el Gobierno hará el ajuste de 5.500 millones sí o sí (con recaudación).
Normalización política, con el permiso del
PSOE para que
Rajoy haya podido formar Gobierno, y un apéndice de normalización, ahora, en la próxima renovación de la cúpula del
Banco de España. Y ahí, el ministro de Economía,
Luis de Guindos (
en la imagen), ha devuelto el gesto.
En otras palabras, contará con el candidato que proponga el PSOE para sustituir al actual subgobernador,
Fernando Restoy, que dejará su puesto en enero para incorporarse al incorporarse al
Banco Internacional de Pagos de Basilea.
Guindos lo ha confirmado en Bruselas, al ser preguntado al respecto, y mantiene así el
consenso recuperado en la última legislatura (la "tradición") y que se había roto durante el mandato socialista de
Rodríguez Zapatero (con
Mafo,
Miguel Ángel Fernández Ordóñez, gobernador, y
José Viñals, subgobernador). El ministro ha dicho también que espera que el actual gobernador,
Luis María Linde, cumpla su mandato hasta el final.
Así las cosas, el referente para esos cambios no será
Ciudadanos, con el que el PP está más cerca para avanzar en la legislatura. Paradójicamente, el partido de
Albert Rivera impidió que
Elvira Rodríguez siguiera al frente de la
CNMV cuando cumplió su mandato. Dijo que fuera y fuera quedó.
Guindos ha tenido buenas palabras para Fernando Restoy, con quien ha tenido no pocos encontronazos durante la crisis bancaria y el saneamiento posterior.
Ha destacado el "buen trabajo" de Restoy "y su contribución en un momento muy difícil", lo cual tiene algo de
elogio fúnebre. No se han llevado bien precisamente aunque el momento no pide leña: manda la cordialidad.
Las diferencias entre Guindos y Restoy han sido continuas. Emergieron en distintos episodios, como el nombramiento de
Goirigolzarri al frente de
Bankia, que Restoy no quería, o la adjudicación de las cajas gallegas a
Juan Carlos Escotet (
Abanca), que no era la mejor opción ni de lejos.
El colofón del desencuentro fue el relevo de Restoy como presidente del
FROB (Fondo de Garantía de Depósitos de Entidades de Crédito). Un cargo llevaba al otro, pero Guindos descolgó a Restoy el año pasado y puso al frente del fondo de rescate a
Jaime Ponce.
Por otro lado, el ministro ha trasmitido también a la
Comisión Europea que el Gobierno hará el ajuste de 5.500 millones (el 0,5% del PIB) en el
déficit público para que no suspenda parte de los
fondos estructurales de 2017. España está cumplido, ha dicho, por la positiva evolución del
Impuesto de Sociedades. Fue la vía elegida para aumentar la recaudación y evitar nuevos
recortes sociales.
Rafael Esparza