Jordi Gual junto a Fernando Restoy, presidente del Instituto para la Estabilidad Financiera, dependiente del Banco de Pagos Internacionales (BIS)
Jordi Gual no es partidario de una fusión Bankia-ICO que dé lugar a un banco estatal. “La banca pública ya ha existido sin buenos resultados” recordó el presidente de Caixabank. “España tuvo banca pública en el pasado y luego se ha ido circunscribiendo al ICO, como en otros países europeos”, afirmó este martes durante un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Forum.
El directivo no quiso entrar a valorar la posibilidad de que un gobierno PSOE-Podemos suba los impuestos a la banca (aplique la tasa Tobin, por ejemplo), pero sí dejó claro que el sistema impositivo debe ser “prudente, justo y equilibrado entre sectores”.
A Gual le preocupa la situación que se vive en Cataluña, y más aún que los “episodios puntuales de tensión” se prolonguen en el tiempo, se cronifiquen. “Hacemos un llamamiento al diálogo dentro de la ley”, señaló el directivo que recordó el papel que siempre ha jugado Caixabank: “promover el diálogo y el progreso social con la confrontación de propuestas políticas dentro de la ley”.
Asunto de rabiosa actualidad: los tipos de interés negativos que Gual calificó de “gran anomalía”. “Es el mundo al revés. El deudor cobra intereses y el prestamista los paga”, señaló. El directivo reconoció el impacto positivo en la economía que tuvieron los tipos negativos en el pasado, pero reconoció que, actualmente, el estímulo de esta medida es “escasísimo”. Ahora bien, Gual no dijo que, para estimular la economía, esta política monetaria debe dar paso a una rebaja de impuestos. Lástima.
¿Y qué hay de las fusiones transfronterizas, después de los argumentos que esgrimió el lunes Luis de Guindos? Gual coincidió con el vicepresidente del BCE en que podrían ser positivas, pero para el presidente de Caixabank, ahora mismo no tiene sentido hablar de este tipo de uniones porque no se dan las condiciones para que se produzcan.