Amazon no sólo ofrece descuentos en productos, también en lo laboral. Al conflicto laboral que ha durado tres años en el centro logístico de San Fernando de Henares (Madrid), se suma el castigo por precarizar empleos (la Inspección de Trabajo le ordenó dar de alta 4.000 repartidores y pagar unos 6 millones de euros en cotizaciones impagadas), pero la cosa no acaba ahí, porque esto y mucho más obedece a que le gusta tener una plantilla fluctuante y sin afiliación sindical.

Así lo han señalado fuentes de CCOO a Hispanidad. Este lunes y martes, Amazon celebra el ‘Prime Day’, un evento para los suscriptores del servicio de pago Prime (36 euros al año y sin gastos de envío), con descuento en dos millones de productos. Y para promocionarlo aún más, ofrece la suscripción a Prime por un periodo gratuito de 30 días sin permanencia. Eso sí, el ‘Prime Day’ llega en vísperas de la concentración convocada por CCOO en el centro logístico de Sevilla tras el despido de dos trabajadores que se estaban organizando para hacer elecciones sindicales y crear un comité de empresa. Recuerden que el pasado abril fracasó la iniciativa para crear el primer sindicato de Amazon en EEUU en la planta de Alabama y que puso trabas al recomendar que los empleados no usaran el voto por correo para elegir a sus representantes laborales. Por su parte, desde Amazon señalan que “respetamos el derecho de nuestros empleados a formar, unirse o no unirse a un sindicato o a cualquier otra organización legal de su elección. Mantenemos una relación constante con actitud de colaboración con los sindicatos y comités de empresa en nuestros centros en España”. 

Amazon anuncia miles de nuevas contrataciones, pero no todas de forma directa sino también a través de ETT, para estar preparada de cara a periodos punta de actividad. Claro que cuando esa época acaba, el 50% se queda y el 50% se va 

El gigante estadounidense de comercio electrónico presumía hace poco más de diez días de crear 3.000 nuevos empleos fijos en España, llegando a 15.000, pero no es oro todo lo que reluce. Lo que no dice es que muchos de estos nuevos empleos no se contratan de forma directa, sino a través de ETT, según CCOO, como suele pasar en otras ocasiones. Se trata de procesos de contrataciones habituales a mitad de año para que los trabajadores estén preparados de cara a periodos punta de actividad de los próximos meses (Black Friday, Cyber Monday, campaña de Navidad, etc.), pero cuando baja la actividad, normalmente el 50% de los nuevos trabajadores se queda y el 50% se va. Claro que también parte de los 3.000 nuevos empleos se debe a los nuevos centros logísticos que va a abrir en nuestro país: entre ellos, los de Montcada i Reixac y Mollet del Vallès. Por su parte, desde Amazon la respuesta es que son empleos fijos con contrato en Amazon porque cuando crea empleos temporales lo indica. 

Paralelamente, CCOO recuerda que hay otras salidas en el gigante estadounidense de comercio electrónico en España: a primeros de año, ofrece unas salidas pactadas a los empleados que llevan uno o dos años en la empresa, a cambio de entre 6.000 y 12.000 euros, a los que hace firmar un documento de que no volverán a trabajar en Amazon. La media de edad de los trabajadores es inferior a los 35 años y la plantilla es fluctuante, pues se lo suele tomar como una salida laboral puntual, no a largo plazo. Una muestra de esto es que si otras empresas suelen procurar la formación continua de sus empleados en sus áreas propias de actividad, a Amazon no le importa subvencionar hasta el 80% de la formación en otras materias y aspectos (inglés, cursos de cocina, etc.) para que los trabajadores puedan acceder a otros trabajos en otras compañías.

A primeros de año, ofrece unas salidas pactadas a los empleados que llevan uno o dos años en la empresa, a cambio de entre 6.000 y 12.000 euros, a los que hace firmar un documento de que no volverán a trabajar en Amazon

Como el objetivo es seguir teniendo una plantilla fluctuante, Amazon dificulta la afiliación a los sindicatos y el trabajo de estos. Todo ello al tiempo que va imponiendo fuertes ritmos de trabajo (ratios de producción). Como el objetivo es seguir teniendo una plantilla fluctuante, Amazon dificulta la afiliación a los sindicatos y el trabajo de estos. Todo ello al tiempo que va imponiendo fuertes ritmos de trabajo (ratios de producción). Los sindicatos celebran la modificación del artículo 64 del Estatuto de los Trabajadores, por la cual los comités de empresa pueden solicitar en base a qué criterio se establece dicho ratio o porque se incrementa a veces a mitad de mes, entre otras cuestiones.

Paralelamente, conviene destacar otra muestra de la caradura del gigante estadounidense de comercio electrónico: el pasado miércoles se adhirió al Plan Sumamos Salud+Economía de la Fundación CEOE para apoyar a las Administraciones Públicas en la mitigación de los efectos adversos de la Covid-19. Así, presume de que desde el inicio de la pandemia ha puesto en marcha multitud de medidas y procesos en sus centros y red logística centrándose en tres bloques básicos (distancia interpersonal; higiene y limpieza; información y concienciación) y de que ha comprado más de 39 millones de pares de guantes, 17,9 millones de mascarillas, 74 millones de toallitas y 12,7 millones de desinfectante de manos. Eso sí, no dice nada de que en marzo de 2020, la Inspección de Trabajo dio un ultimátum a Amazon​ y le exigió que mejorara la seguridad de los trabajadores del centro logístico de San Fernando de Henares.