Consejo de Ministros del Coronavirus. A escena la imprescindible ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, superándose un día sí y otro también: ¡Verbo florido! Exposiciones interminables para no decir nada, pero capaz de venderle una nevera a un esquimal.

Porque claro, el problema de Sánchez el ‘sádico’ es la posible rebelión ciudadana. Por miedo a morir, la gente se dejó encarcelar en casa, y las primeras semanas todos aplaudimos a nuestros héroes y chillamos al insolidario del vecino que sacaba a pasear al perro y nos podía provocar la muerte prematura a manos del enemigo invisible. Pero vamos camino de seis semanas y el sádico nos emplaza para el 9 de mayo… aunque pudiera ser que no bastara.

Y entonces el asunto de los niños se convierte en prioridad política. Pues bien, en una durísima decisión el Gobierno, permitirá salir a los niños a partir del lunes 27. Ojo… lo mismo que antes: acompañados de un adulto al super, a la farmacia o al banco. ¡Qué exceso! ¡Viva el lujo y quien lo trujo!

La única diferencia es que antes tenías que explicarle al policía que habías cogido al niño porque no tenías con quien dejarlo y ahora pueden salir… a eso y sólo a eso. Con lo que se divierten los niños en el BBVA o en el Santander…

Pero ojo, a las pocas horas cambió. Ahora podrán pasear, aunque tampoco está claro cómo ni cuándo. Porque parece un poco absurdo enviar a los niños la supermercado, atestado de gente.

Y las denuncias sobre quién rompe el confinamiento continúan al alza. Es decir, el Consejo de Ministros teme que estalle la rebelión ciudadana contra una medida de arresto domiciliario que está acabando con la paciencia de más ciudadanos, de hora en hora.

Y ya no cuela eso de se están salvando vidas, que repite ‘Marisú’ Montero. Entre otras cosas, porque el confinamiento no ha salvado vidas sino todo lo contrario: el desastre de Sánchez es que somos el país del mundo con más contagiados y más muertos por coronavirus.

Medidas económicas. Lo único que ofrece el Gobierno son más subsidios, que no más trabajo

Más mentiras. Marisú Montero, apuesta por la libertad total de expresión… pero el CIS concluye lo contrario, al preguntar a una población temerosa si hay que hacer caso a los bulos, Desde luego que no Tezanos.

¿Y lo del general Santiago?  Marisú responde: “Fue un lapsus”. ‘Marisú’ es grande. Eso, dos horas después de que el general Santiago se metiera aún más en el fango y cuando los comunicadores del PP, de vez en cuando hacen algo bueno, utilizan a la metepatas de Isabel Celaá para demostrar que… ¡no fue un lapsus!

¿Medidas económicas? Lo único que ofrece el Gobierno son más subsidios, que no más trabajo. Y hace mal. Si nos vamos a endeudar todos (por cierto, que cara tan dura tienes Nadia Calviño, mira que soltar que los subsidios no tienen nada que ver con la deuda…) porque no utilizas esa deuda para crear puestos de trabajo en lugar de para pagar subvenciones.

Creando puestos de trabajo, aunque sean públicos, beneficias a los esforzados, Con subvenciones públicas, sólo contentas a los vagos.