La subida del IPC en marzo se debe, principalmente, al encarecimiento de la electricidad y de los carburantes
¿Acaba la deflación? Puede ser, porque el Índice de Precios de Consumo (IPC) ha subido casi 1,5 puntos y se ha situado en el 1,3% en tasa anual en marzo, la más alta desde abril de 2019, según los datos adelantados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que se confirmarán o rectificarán el próximo 14 de abril.
Se trata de la tercera tasa anual positiva consecutiva que encadenan los precios, tras las de enero (0,5%) y febrero (0,0%). Ahora se sitúa en niveles que no se veían desde hace casi dos años y que se debe, principalmente, al encarecimiento de la electricidad y de los carburantes.
Por su parte, en tasa mensual, el IPC se ha incrementado un 1%, el mayor alza desde octubre de 2019, respecto a la bajada registrada en febrero (-0,6%).
La inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) se ha situado en un 0,3% en tasa anual, igual que el pasado febrero. Mientras, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) ha sido del 1,2% en tasa anual, casi 1,5 puntos más que el mes anterior, y ha subido un 1,9% en tasa mensual.