La infamia se va a consumir. El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha evitado desmentir a Junqueras sobre sus declaraciones acerca de la amnistía con ERC: "Las conversaciones pueden ser discretas, pero los acuerdos son transparentes". Aseguró que será "coherente con la política de normalización y estabilización de la situación política en Cataluña" que ha llevado a cabo su Gobierno en los últimos cinco años. Preguntado por la situación judicial de Puigdemont, Sánchez ha lamentado que "una crisis política nunca tuvo que derivar en una acción judicial" y ha abogado por "devolver a la política lo que nunca tuvo que salir de la política".

Y mientras, los veteranos socialistas González y Guerra cargan contra una amnistía a "felones": "No podemos dejarnos chantajear por nadie". ¿No hay cuatro diputados socialistas que quieran parar la infamia que va a perpetrar Sánchez?

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