Vocento, cuyo CEO es Luis Enríquez, a la deriva... en cuentas y en ideario
En el primer semestre de 2023 el grupo Vocento perdió 11 millones de euros, su venta de ejemplares disminuyó aún más y la publicidad digital no funciona. O si funciona pero al ralentí. La transición desde un periodismo de papel a otro de bits va a ser más larga de lo que parece. En pocas palabras, un desastre. Ahora bien, todos los grupos periodísticos están en crisis. Por tanto, en ese sentido poco que decir. La transición de la prensa vegetal a la prensa digital está resultando muy dañina.
Pero quizás el problema de ABC, buque insignia de los vascos de Vocento sea otro. Alguien dijo que ABC está dirigido por quien no cree en el ABC. Y el ideario y la cuenta de resultados, en un periódico, no son dos líneas paralelas sino una cruz y una encrucijada.
Ejemplo: ultimo especial de Mujer Hoy. Atención, hablamos del suplemento femenino del ABC: en portada una transexual en portada, un transexual, convertido en ejemplo de las maravillosas nuevas libertades. Luego está lo del hijo de Soros, nuestro héroe, que también tienes mucha enjundia. Finalmente, la directora alabando a Harari, un centrífugo convertido en el nuevo intelectual de referencia.
O sea, el verdadero ABC, que diría Luis María Anson.
Si Vocento lo hacen los que no creen en el ideario de Vocento, o del ABC, exponente de lo que antes se llamaba humanismo cristiano, entonces me temo que el único problema al que se enfrenta el grupo no es la transición digital, es otra cosa.
Vocento a la deriva... en cuentas y en ideario.