El Índice de Precios de Consumo (IPC) incrementó en junio su tasa anual cuatro décimas, hasta situarse en el 10,2% en España, y hoy llega la comparativa temida por Moncloa. Así, la inflación de la Eurozona alcanzó en el mes de junio el 8,6%, lo que supone un crecimiento de décimas con respecto al mes anterior y un nuevo máximo histórico, según ha informado la oficina de estadística comunitaria, Eurostat.

Las causas del ‘subidón’ han sido el alza hasta el 41,9% del precio de la energía, desde el 39,1% de mayo, el incremento del precio de los alimentos frescos del 11,1% interanual, el aumento del 3,4% interanual de los servicios, una décima menos que el mes anterior, mientras que los precios de los bienes industriales no energéticos subieron un 4,3%, frente al 4,2% de mayo.

Entre los Diecinueve, Estonia fue en junio el país de la moneda común con una mayor inflación (22%), seguida de Lituania (20,5%) y Letonia (19%). España también se situó por encima de la media con un 10,2%. Además, otros cinco miembros de la zona euro tuvieron subidas de doble dígito: Eslovaquia (12,5%); Grecia (12%); Eslovenia (10,8%); Bélgica (10,5%) y Luxemburgo (10,3%).

Por contra, solo dos países moderaron su inflación, Alemania que pasó del 8,7% al 8,2%, y Países Bajos, donde pasó del 10,2% al 9,9%. Las tasas anuales más bajas se registraron en Malta (6,1%), Francia (6,5%) y Finlandia (8,1%).

Pero todos tranquilos, podría ser peor y ya está Pedro para solucionarlo