La coherencia es una virtud que no está de moda en política, donde abunda la incoherencia. La penúltima muestra se ha podido ver en el pepero Juan Manuel Moreno Bonilla, que ha hablado de “defender ahora más que nunca a nuestros agricultores”, mientras se talan olivos y se expropian fincas en Andalucía... para instalar placas fotovoltaicas. ¡Olé!

El presidente de la Junta de Andalucía se atrevió a pronunciar dichas palabras en Bruselas el pasado 15 de mayo, día de San Isidro Labrador, patrono de los agricultores españoles desde que lo decretara San Juan XXIII siendo Papa en 1960. “Dada la inestabilidad geopolítica que vivimos y la propia seguridad alimentaria que se ha convertido en algo crucial en la protección de los ciudadanos europeos parece fundamental e importante defender ahora más que nunca a nuestros agricultores y ganaderos”, afirmó. “Tengamos claro que la soberanía alimentaria es seguridad alimentaria y eso requiere una PAC (Política Agraria Común) fuerte que no pierda recursos” e “independiente de otros fondos comunitarios”, añadió, al tiempo que defendió dar prioridad a la construcción de infraestructuras hídricas, menos burocracia en la PAC y normas que impidan que terceros países importen a la Unión Europea con ventajas por ejemplo con las denominadas cláusulas espejo. 

Frases que podrían ser dignas de enmarcar de no ser por lo que está ocurriendo en el campo andaluz, entre otros lugares (por ejemplo, en el municipio madrileño de Aranjuez). Se están talando olivos para instalar placas solares y hay miles de que agricultores y propietarios se ven entre la espada y la pared porque o arriendan sus tierras o hay amenaza de expropiación. De hecho, un día antes de que Moreno Bonilla hablara en Bruselas, SOS Rural y Campiña Norte contra las Megaplantas Solares entregaron 50.000 firmas en el Parlamento de Andalucía para exigir que no haya más destrucción de la superficie agrícola útil.

 

En paralelo, este lunes, las organizaciones agrarias la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) y la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) han entregado en la sede de la Comisión Europea en España el manifiesto ‘El castillo de naipes de la UE’, donde defienden una PAC “fuerte y bien financiada”.