Ignacio Herrero Ruiz ha señalado que China Three Gorges (CTG) “es una utility al estilo de Endesa e Iberdrola”. Esa ha sido su respuesta para los que confunden a la compañía con un fondo soberano, pese a que tiene un 100% de capital estatal... y chino, un fondo de inversión o un fondo de infraestructuras.

CTG es una empresa eléctrica china cuya historia empezó en 1994 y gestiona, entre otros activos, la mayor central hidroeléctrica del mundo (la presa de las Tres Gargantas, en China). Herrero Ruiz es su CEO en Europa y ha destacado en el foro ‘Wake Up, Spain!’ organizado por El Español, que es “la primera vez que participamos en un evento en España”, y que son “una generadora pura enfocada en energías limpias”, que gestiona 120 gigavatios (GW) de capacidad, “lo que equivale al total de capacidad del Estado español”.

Olvida mencionar el fracaso de su opa... y prefiere destacar las inversiones en otros países europeos, como: España, Italia, Polonia, Reino Unido y Alemania

Herrero Ruiz ha subrayado que CTG tiene cuatro plataformas situadas en el sudeste asiático, Brasil, Hispanoamérica y Europa. Precisamente, en esta última, destacan sus inversiones en Energías de Portugal (EDP), donde entró en 2011, siendo su “primer hito de expansión internacional” y actualmente, sigue siendo su primer accionista. “Hemos sido un buen socio estratégico y leal “ en EDP, ha subrayado, aunque se le ha olvidado mencionar el fracaso de su opa... En lugar de esto, ha preferido destacar las inversiones en otros países europeos, como: España, donde entraron en 2020 al comprar 500 megavatios (MW) solares de X-Elio, a los que después sumó otros 330 MW eólicos, unas operaciones que no gustaron en Bruselas; Italia, Polonia, Reino Unido y Alemania (allí llegaron en 2016).

El consejero delegado de CTG en Europa ha destacado que la ley 54/1997 del sector ya recogía algunos de los objetivos que se plantean actualmente, como: minimizar el coste de la energía, mejorar la seguridad de suministro y la calidad de aire. Eso sí, ahora son más ambiciosos “y hay una realidad geopolítica que los sustenta”, y ha añadido que “necesitamos más Europa para lograr eficiencia en el desarrollo de esas políticas y teniendo en cuenta como objetivo de medio y largo plazo esa soberanía energética”.

Destaca que en renovables, “el oligopolio se ha roto y es un sector muy atomizado”, donde “se ha perdido la visión industrial y ahora hay una más financiera”

En cuanto a tecnologías, Herrero Ruiz ha destacado que algunas “han estado subvencionadas y ya son competitivas (como la eólica y la solar)” y hay otras que no son competitivas ni lo van a ser a términos de mercado (por ejemplo, la solar térmica). Eso sí, ha pedido no demonizar ninguna y aprovechar las que ya están, al tiempo que se apuesta por otras nuevas que hoy no son competitivas (hidrógeno, hibridación, baterías...), pero lo serán. Y ha destacado que en renovables, “el oligopolio se ha roto y es un sector muy atomizado”, en el que “se ha perdido la visión industrial y ahora hay una más financiera”, pero donde CTG busca “jugar un rol industrial y de largo plazo”, “no estar cinco o siete años en el activo”, ayudando a las compañías a desbloquear recursos. “Actuamos como una compañía occidental pero no somos una occidental al uso”, ha subrayado, añadiendo que van paso a paso, y a su apuesta por eólica, solar e hidráulica, ahora suma proyectos de centrales de bombeo o en las antiguas minas de carbón para depurar el agua de los acuíferos.

Paralelamente, en el mismo foro, Miguel Stilwell, consejero delegado de EDP y presidente y consejero delegado de la filial verde (EDPR), ha referido que “la intervención en los mercados nunca es una buena idea” y que cualquiera que se haga debería ser muy limitada en el tiempo y el ámbito para distorsionar el mercado lo mínimo posible. Unas declaraciones que coinciden justo cuando la Comisión Europea estudia la propuesta hispano-lusa de topar el precio del gas que entra en el mercado marginalista de la electricidad en 30 euros. Stilwell también ha defendido el funcionamiento del mercado marginalista y ha señalado como el culpable del elevado precio de la luz al precio del gas, que también notan los consumidores de gas y no sólo los eléctricos. Además, ha destacado que producir renovables aquí siempre es mejor, porque “el precio es predecible y estable a largo plazo”, poniéndose en la misma línea que habían defendido antes Josu Jon Imaz, CEO de Repsol, y la vicepresidenta ecológica, Teresa Ribera, frente al presidente y CEO de Iberdrola, Ignacio Galán, que había aludido a que no había seguridad jurídica y al elevado riesgo regulatorio.