Decíamos que la última Cumbre del Clima celebrada en Belém (Brasil), más conocida como COP30, estaba teniendo mucho menos eco que otras... y al final, ha acabado en fracaso total para disgusto de los ‘talibanes’ verdes. Entre estos últimos, está, por supuesto, Sara Aagesen, quien insiste en dejar de usar los combustibles fósiles sí o sí.

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico olvida las últimas previsiones de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), que estima que el petróleo seguirá imperando, al menos, hasta 2050. Y encima, no quiere darse cuenta de que estamos en una nueva etapa mundial, donde la era ecológica va llegando a su fin porque ahora prima la economía sobre la ecología, y hasta los fondos de inversión que presumían de querer ser muy verdes están dando pasos atrás.

La COP30 se ha celebrado entre los días del 6 al 21 de noviembre, pero sin pena ni gloria, exceptuando el hecho anecdótico del incendio que obligó a evacuar las instalaciones durante varias horas. Eso sí, Aagesen valoró negativamente el texto propuesto por la presidencia brasileña de la Cumbre... y no hay que olvidar que Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil, ha decepcionado bastante a todos los ecologistas mundiales porque se limitó a hablar de biodiversidad en la inauguración. Y es que el progre Lula no está dispuesto a que le toquen el petróleo: recuerden que el yacimiento de Buzios (situado frente a la costa de Río de Janeiro, en la cuenca de Santos, la cual forma parte de la región del presal) está contribuyendo a que Brasil sea una de las principales fuentes de crecimiento del petróleo fuera de la OPEP y la región del presal, uno de los campos más grandes y productivos del mundo, ha situado al país como el principal proveedor de petróleo de Hispanoamérica.

Para Aagesen, el texto final de la cumbre no refleja “toda la ambición que nos gustaría ver” ni ha incluido el tema de la mitigación del cambio climático, pero lo ha acabado apoyando porque “tiene más elementos gracias a la Unión Europea” y considera que “Europa ha estado en el lado bueno de la historia”, según ha referido en una entrevista con El País. Eso sí, en esta última, no se ha atrevido a criticar a Lula, pero sí a los países árabes e incluso a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, por haber dicho en el G-20 que no se trata de luchar contra los combustibles fósiles, sino contra sus emisiones. Sin embargo, Aagesen opina que se debe ir hacia el abandono progresivo de los combusibles fósiles, sí o sí. 

De cara a la COP31, que organizarán Australia y Turquía, aunque se celebrará en la ciudad turca de Antalya del 9 al 20 de noviembre de 2026, se debería tener en cuenta el número de plazas hoteleras disponibles. Y es que, en el caso de la COP30 no había habitaciones de hotel suficientes, y además eran bastante caras, por lo que algunos asistentes han tenido que dormir en barcos en el río Amazonas.