Si hace apenas cinco días, el Tesoro colocó obligaciones a largo plazo a un menor interés, este martes ha tenido que elevar la remuneración para colocar letras a 6 y 12 meses. Y eso a pesar de la ayuda del BCE a los países más endeudados, esto es, España, Italia y Grecia.

Hablamos, en concreto, de 814,59 millones de euros en letras a seis meses a un interés marginal del 0,465%, casi el triple del 0,134% de la anterior subasta celebrada en julio. La demanda fue de 3.694,59 euros, lo que muestra el gran interés por la deuda española, circunstancia no siempre positiva, porque puede fomentar la irresponsabilidad de nuestros gobernantes, si es que aún es susceptible de aumentar.

El organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Tranformación Digital colocó, además, 4.000 millones en letras a 12 meses, a un interés del 0,795%, superior al 0,702% de julio. La demanda fue de 6.284,08 millones.

La mano del BCE está siendo clave para mantener controlado el precio de la deuda. Así, según el Financial Times, el BCE inyectó 17.000 millones de euros en los mercados de España, Italia y Grecia, al tiempo que redujo su cartera de deuda alemana, francesa y holandesa en unos 18.000 millones. La pregunta es, ¿hasta cuándo lo hará? y, sobre todo, ¿a cambio de qué?.