Enel recibe aplauso en bolsa este viernes, tras anunciar nuevas inversiones en energía nuclear, ingresos récord y elevar el resultado bruto de explotación (ebitda) en 2022. Todo ello hace que su CEO, Francesco Starace, se afiance de cara a su posible renovación para la Junta de Accionistas que se celebrará el próximo 10 de mayo, con la que podría convertirse en el primero que renueve por un cuarto mandato como primer ejecutivo, y cabe referir que tiene un gran prestigio, no hay contradicciones con Giorgia Meloni y estamos en plena crisis energética.

Starace ha confirmado las previsiones para 2023 de la energética italiana, la cual está controlada en un 23% por el Estado italiano y que es dueña del 70% de Endesa: “Naturalmente se confirma la orientación de 2023”, ha señalado en la conferencia con analistas. Respecto a las desinversiones del plan estratégico que ascenderán a 21.000 millones de euros, tras anunciarse la venta del negocio de Rumanía a la griega PPC por 1.260 millones, se está procediendo a la venta de activos en Perú que podría “llegar antes de que finalice el semestre”, y también se trabaja para hacer lo mismo en Argentina y para desprenderse de la cartera de gas en España (1,8 millones de clientes). Además, hay que recordar que Starace es vicepresidente de Endesa y si al final renueva, se apuntalaría también a José Bogas como CEO de Endesa.

Ha alcanzado un acuerdo con la empresa de tecnología nuclear Newcleo para diseñar y construir innovadores reactores de cuarta generación que reducen los volúmenes de plutonio y residuos radiactivos al convertir estos últimos en combustible: primero uno pequeño en Francia y luego otro más grande en Reino Unido

Entre los planes de Enel también están las nuevas inversiones en nuclear, por ahora, fuera de Italia, según informa el periódico italiano Milano Finanza. A los más de 3.300 megavatios (MW) nucleares que tiene en España (repartidos en seis de los siete reactores operativos), se suma una participación de casi el 33% en la empresa eslovaca Slovenské elektrárne (la cual acaba de conectar a la red el primero de los dos aerogeneradores de la unidad 3 de la central nuclear de Mochovce), añade el acuerdo con la empresa de tecnología nuclear Newcleo para diseñar y construir un Mini LFR (reactor rápido de plomo) de 30 MW en Francia para 2030 y otro de 200 MW en Reino Unido. Este pacto se basa en desarrollar innovadores reactores de cuarta generación que reducen los volúmenes de plutonio y residuos radiactivos al convertir estos últimos en combustible para reactores, y así también eliminan la necesidad de extraer uranio del suelo. Además, Newcleo invertirá directamente en una planta de fabricación de Mox (óxido mixto de uranio/plutonio, producido a partir de residuos).

Vayamos a los números de 2022. Enel ha tenido un resultado ordinario neto de 5.391 millones, superando el rango previsto, pese a que la cifra es un 3,6% inferior a la del año anterior (5.593 millones), gracias a la mejor evolución del negocio, que ha sido parcialmente compensada por el aumento de las amortizaciones, una gestión financiera más eficiente de pasivos y la menor carga fiscal. Por su parte, el resultado atribuido neto se ha desplomado un 47,3%, a 1.682 millones, frente a los 3.189 millones de 2021, fundamentalmente por los mayores costes. Eso sí, el ebitda ha crecido un 2,5%, pasando de 19.210 millones a 19.700 millones, y el resultado neto de explotación (ebit) ha crecido a dos dígitos (+48,2%), a 11.2000 millones.

El coste de la electricidad, el gas y el combustible empleado en las operaciones de Enel se ha duplicado, situándose en 96.896 millones; y el gasto de servicios y materiales ha ascendido a 20.228 millones (+5%)

Como ya avanzó, Enel ha logrado un récord de ingresos en 2022, alcanzando los 140.517 millones, una cifra que se ha disparado un 63,95% por los mayores volúmenes de electricidad generados y vendidos en un mercado con precios más altos y con cambio de divisas favorable. Por negocios, el de comercialización y generación térmica se ha duplicado, aportando 76.335 millones (+134%); le sigue el de mercados finalistas, con 62.152 millones (+65%); infraestructuras y redes, con 23.032 millones (+13,8%); Enel Green Power, con 9.167 millones (-0,05%); y Enel X, con 2.209 millones (+54,7%). Por su parte, el coste de la electricidad, el gas y el combustible empleado en sus operaciones se ha duplicado, situándose en 96.896 millones; y el gasto de servicios y materiales ha ascendido a 20.228 millones (+5%). Además, la deuda neta se ha reducido respecto a los nueve primeros meses, aunque ha cerrado el año en 60.068 millones, siendo un 16,2% superior a la de 2021 por las inversiones. 

De cara a la próxima Junta de Accionistas, la energética italiana propondrá un aumento del dividendo del 5,3%, a 0,40 euros por acción, desembolsando cerca de 4.000 millones; así como una nueva recompra de acciones de hasta 2.000 millones. Claro que lo más interesante será las renovaciones, entre ellas, si se propone o no la de Starace. “Los excelentes resultados que registró Enel en 2022 destacan la capacidad del Grupo para crear valor para sus grupos de interés incluso frente al contexto altamente desafiante que ha caracterizado los últimos tres años”, ha apuntado el CEO. “En los próximos meses del año seguiremos creciendo en renovables y digitalizando las redes de distribución y concentraremos las inversiones sobre todo en Italia y en el resto de países core, para acelerar la senda de crecimiento sostenible del Grupo, reduciendo más su perfil de riesgo”, ha añadido.