Parece que a The Walt Disney Company le ha sentado bien el repliegue woke a la vista de los resultados de su primer semestre fiscal (octubre a marzo). Estos han gustado a los inversores porque su cotización ha subido un 10,7% tras el cierre de mercado del día 7, al haber elevado ingresos, triplicar beneficio y ganar suscriptores. Y todo ello, a pesar de que tuvo que estrenar Blancanieves, película de cuando aún era woke que ha fracasado en taquilla: ha obtenido 255 millones de dólares de recaudación, frente a los 200 millones a los que ascendió su presupuesto,... casi lo comido por lo servido. Además, ante dicho fracaso se ha adelantado su llegada al streaming al próximo 13 de mayo, según informa el portal Vandal.  

Eso sí, no hay que olvidar que el gigante de ocio y entretenimiento liderado por Robert Iger (74 años) no hizo el repliegue woke por principios ni por el bien de la infancia ni por la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca, sino por razones económicas: muchos fracasos en taquilla y desplome bursátil. Pérdidas de dinero tras demasiados años impulsando el adoctrinamiento de menores sobre los postulados del Nuevo Orden Mundial (NOM) a través de sus contenidos y reconociendo la existencia de una agenda LGTBI. Postulados que se pueden resumir en: ideología de género (feminismo, homosexualismo, personajes no binarios… e incluso un incipiente tema trans al que después renunció al darse cuenta de la barbaridad que supone) y ateísmo (mucho panteísmo, nada de Dios ni de lo espiritual e incluso una apuesta por la normalización del satanismo y dar protagonismo al demonio).

Razones económicas que han llevado no sólo al repliegue woke sino a que desde hace meses el propio Iger refiera que ahora la prioridad sea “entretener” y “no guiarse por una agenda”. Eso sí, Iger será relevado en 2026: Disney espera anunciar el nombre de su sucesor a principios de dicho año porque el contrato de Iger acaba en diciembre y su búsqueda es la principal tarea del presidente, el empresario y financiero australiano-estadounidense James Patrick Gorman (66 años). Claro que Iger aún debe afrontar la falta de ideas que hay en la factoría de Mickey Mouse: tienen poco contenido original y demasiadas secuelas de películas tanto en versión animada como en versión humana... e incluso sobre algunos personajes (por ejemplo, habrá una sobre el Príncipe Encantador de Cenicienta, tras las películas de Cruella, Campanilla, etc.) y seguirá estirando la saga de Star Wars, así como los contenidos sobre los superhéroes de Marvel.

El nuevo parque de Abu Dabi “será auténticamente Disney y distintivamente emiratí”, afirma Iger. ¿Y eso qué quiere decir, pues la mezcla resulta de antemano un tanto curiosa? Se trata de su primer parque en Oriente Medio y el primero que abrirá en los últimos 15 años

Vayamos a los resultados del primer semestre (octubre a marzo). Los ingresos se han incrementado un 5,9%, hasta 42.617 millones; y el beneficio neto atribuido se ha triplicado, alcanzando los 5.142 millones. “Tras un excelente primer semestre del año fiscal, tenemos mucho más que esperar, incluyendo nuestra próxima programación en cines, el lanzamiento de la nueva oferta DTC (directa al consumidor, es decir, streaming) de ESPN y un número sin precedentes de proyectos de expansión en marcha en nuestro segmento de Experiencias”, ha señalado Iger. Sobre esto último, cabe destacar que elevará la cifra de parques hasta un total de siete con la construcción de uno nuevo en Abu Dabi. “Será auténticamente Disney y distintivamente emiratí”, ha añadido Iger. Se trata de su primer parque en Oriente Medio y el primero nuevo en los últimos 15 años. 

Respecto a los resultados de su segundo trimestre fiscal (enero a marzo), la evolución también ha sido positiva. Los ingresos han crecido un 7%, a unos 20.837 millones de euros. De estos, la división de Entretenimiento (estudios de cine, canales de televisión convencional, plataformas de streaming, licencias y contenidos) ha aportado 9.423 millones (+9%); el área de Experiencias -parques temáticos y tiendas-, 7.841 millones (+6%); y el área de deportes -es decir, ESPN-, 4.000 millones (+5%). El grupo ha detallado que dentro de la división de Entretenimiento, el negocio de televisión convencional ha facturado 2.133 millones (-13%); el de streaming -a través de las plataformas Disney+ y Hulu-, 5.397 millones (+8%) gracias al aumento de suscriptores y la subida de precios, pese a la fuerte competencia del sector y la caída de ingresos publicitarios (esto es algo bueno porque se los roba a la prensa, como Google y Facebook); y el de licencias y contenidos ha disparado sus ingresos un 54%, hasta 1.893 millones. De hecho, ha pasado de perder 1,4 milllones de suscriptores entre octubre y diciembre a ganar esa misma cifra entre enero y marzo, muy por encima de las 1,1 millones de bajas que preveían los analistas. Así, Disney+ ya cuenta con 126 millones de clientes... aún muy lejos del líder del sector (Netflix) y con otros 54,7 millones en Hulu, lo que suma un total de 180,7 millones. 

El negocio de televisión convencional entre enero y marzo factura 2.133 millones (-13%); el de 'streaming' -a través de las plataformas Disney+ y Hulu-, 5.397 millones (+8%) gracias al aumento de suscriptores y la subida de precios, pese a la fuerte competencia del sector y la caída de ingresos publicitarios (esto es algo bueno porque se los roba a la prensa, como Google y Facebook)

Todo esto ha repercutido en un notable crecimiento de ingresos (+7%), que además ha superado al registrado en la partida de costes y gastos, la cual ha ascendido a 17.744 millones (+4,7%). De esta forma, el beneficio neto atribuido ha ascendido a 2.889 millones, muy lejos de los números rojos de 18 millones obtenidos hace un año.

La factoría de Mickey Mouse puede sonreír ante las cifras obtenidas, y también los inversores, porque se ha revisado al alza la previsión de ganancias para el conjunto del ejercicio. Eso sí, ha advertido que persiste la incertidumbre sobre el entorno operativo para el resto del ejercicio… algo en lo que influirán los aranceles impuestos por Trump, de hecho, recientemente ha anunciado un arancel del 100% para las películas producidas fuera de EEUU.