El presidente del Gobierno de Pedro Sánchez presumió esta misma semana de la "buena marcha de la economía", afirmación que englobaba, entre otras, una especie de euforia por haber reducido el nivel de endeudamiento público hasta el 113,2% del PIB en 2022, algo que su segunda, Nadia Calviño, repite con la misma insistencia, como si fuera una gran noticia. 

Pues bien: el Banco de España ha dado a conocer hoy la cifra actualizada de deuda pública en febrero, que aumentó un 2% respecto a enero -en 30.208 millones de euros-, hasta alcanzar el máximo histórico de 1,52 billones de euros. 

En el último año, la deuda pública ha crecido un 5,4% interanual en febrero, con 78.436 millones de euros más.

Es decir, si al cierre de 2022 la deuda pública era de 1,502 billones de euros, o sea, el 113,2% del PIB, ahora, con un récord de 1,52 billones de euros de deuda pública, la ratio sobre el PIB no sería menor, sino mayor todavía. 

Por todo ello, recientemente, Bruselas clasificaba a España como país de "alto riesgo" a medio plazo por la elevada deuda pública. La clasificación tendrá un papel determinante a la hora de fijar la cuantía del ajuste presupuestario exigido por la UE en 2024, según publicó El Español

Y es que España se encuentra muy lejos del 60% del PIB en deuda que volverá exigir Bruselas, a partir de 2024. 

Y recordemos también que el Banco de España presentó recientemente un informe de Estabilidad Financiera según el cual, en lo que se refiere a la deuda pública, vaticinaba que se mantendrá por encima del 112% del PIB hasta, al menos 2025, si el Gobierno no adopta medidas adicionales, que de momento no tiene previstas. En otras palabras, si Pedro Sánchez vuelve a gobernar tras las elecciones generales, preparen la cartera y lo que tengan a mano, porque el acoso fiscal será histórico.

Insistimos: la euforia económica de Pedro Sánchez y Nadia Calviño son absolutamente impostadas. Y más si nos comparamos con Europa...

Porqe, según los datos difundidos hoy por Eurostat, la economía española despidió 2022 entre los países de la Unión Europea (UE) con mayores niveles de deuda y déficit públicos, que se situaron en el 113,2% y el -4,8% del PIB, respectivamente.

El nivel de deuda soportado por España a cierre de 2022 era el cuarto más alto entre los Veintisiete, sólo por detrás de Grecia (171,3%), Italia (144,4%) y Portugal (113,9%). Por contra, los niveles más bajos de endeudamiento se observaron en Estonia (18,4%), Bulgaria (22,9%) y Luxemburgo (24,6%).

Mientras que el déficit público español ascendió a 63.776 millones de euros al cierre de 2022, un 4,8% del PIB, en comparación con los 82.946 millones (6,9% del PIB) de déficit en 2021. Italia (-8%), Hungría y Rumanía (ambos -6,2%) y Malta (-5,8%) registraron déficit mayores que España, mientras que Dinamarca (+3,3%), Chipre (+2,1%) e Irlanda (+1,6%) contabilizaron los mayores superávit. 

Cabe recordar que Bruselas tiene previsto eliminar en 2024 la suspensión de las reglas fiscales, vigente desde la pandemia de Covid-19, para establecer un periodo de transición con sendas fiscales adaptadas a cada Estado miembro, a los que volverá a exigir que el déficit máximo no supere el 3% desde 2024 con la vista puesta en el 2026.