Deoleo no tuvo un mal 2021 en resultados, pero tampoco fue para tirar cohetes (logró su segundo año consecutivo de beneficios, pasando de 57 millones de euros a 61 millones, aunque el Ebitda bajó de 72 millones a 48 millones). Sin embargo, el CEO, Ignacio Silva, sí lo notó porque ha cobrado 723.000 euros, un 18,76% menos que el año anterior, y también la remuneración media de los empleados, que bajó un 12,28%, a 50.000 euros.

El CEO del productor de aceite de oliva, que es líder en el mundo y está controlado por el fondo CVC (dueño del 56,4% y cuya cabeza visible en España es Javier de Jaime), ha recibido una remuneración fija de 477.000 euros, una retribución variable a corto plazo de 211.000 y 35.000 en otros conceptos (vehículo de empresa y seguros médico y de vida). Estas cifras suman 723.000 euros, frente a los 890.000 del año anterior (que fue su primer ejercicio completo como CEO), cuando su remuneración subió un 40% desde los 635.000 recibidos en 2019 (se incorporó el 12 de abril de abril de dicho año).

Silva ha sido, como es lógico al ser el único ejecutivo, el mejor remunerado entre los ocho consejeros. En total, Deoleo destinó 1,007 millones a sus remuneraciones, un 14% menos que el año anterior. Y Fernando Valdés fue el único que cobró más en 2021, pasando de 57.000 euros a 68.000, lo que supone un 10,30% más.