En Hispanidad hemos ido narrando el parón inmobiliario que se hizo patente durante todo 2023, con caídas en la compraventa de viviendas, debido a los altos tipos de interés y a la subida del precio de los pisos. Aunque los portales inmobiliarios sostienen que estas caídas en las compraventas se deben al "efecto escalón" al comparar las cifras con respecto a un año de alta actividad como fue 2022. 

Sin embargo, el Instituto Nacional de Estadística (INE) publica hoy jueves los datos relativos a 2023 de compraventa de viviendas y firma de hipotecas, con unos datos que marcan la entrada de una posible nueva crisis en el sector. 

Así, la compraventa registró en 2023 un descenso del 9,7% con respecto al año anterior, hasta un total de 586.913 operaciones, por lo que la compraventa vuelve a los descensos tras dos años de incrementos a doble dígito. En concreto, en 2022 y 2021 las compraventas registraron aumentos del 14,8% y del 34,8%, respectivamente.

El retroceso de la compraventa de viviendas en 2023 se ha debido a la disminución tanto de las operaciones sobre pisos de segunda mano (-10,8%) como al de las compraventas de viviendas nuevas (-4,8%).

Y por otro lado, la firma de hipotecas en 2023 se desplomó un 17,8% en 2023, hasta sumar 381.560 préstamos, su menor cifra desde 2020, en un año marcado por las subidas de los tipos de interés para controlar la inflación. 

Con este descenso en 2023, la firma de hipotecas también vuelve a las caídas tras haber encadenado dos años de ascensos, con alzas del 11% y del 23,8% en 2022 y 2021, respectivamente. No obstante, el importe medio de las mismas ha subido un 2% hasta los 142.074 euros, mientras que el capital prestado retrocedió un 19,4% en el conjunto del año pasado. 

Además, debemos recordar la última advertencia de los notarios: "2023 mostró un marcado enfriamiento en el número de compraventas", aunque el precio del metro cuadrado sigue subiendo. 

Es decir, la compraventa baja, pero cae aún más la firma de hipotecas, casi el doble, y el precio del metro cuadrado crece, es decir, el mercado enfrenta una nueva crisis inmobiliaria, pero con un nuevo 'jugador': la inversión extranjera.Dicho en otras palabras, Juan Español no puede acceder a una vivienda, pero la inversión de fuera de España está llegando al país con más fuerza que nunca, y no necesita que un banco le preste fondos para acceder a la compra, tienen el dinero y compran 'a toca teja', y no para vivir, sino para especular.