En numerosas ocasiones, hemos señalado en Hispanidad que la pandemia del Covid-19 ha supuesto un fuerte golpe para el sector aéreo y el turismo mundial, colocando a las aerolíneas al borde de la quiebra… y ojo, no se salvan ni las de low cost. De hecho, Ryanair sigue en pérdidas, aunque las ha reducido un 80% en su tercer trimestre fiscal (octubre a diciembre), y ha cuadruplicado los ingresos.

La low cost irlandesa ha tenido unos números rojos de 96 millones de euros, frente a los de 321 millones de hace un año, pese al impacto de Ómicron, que afectó negativamente a las reservas y las tarifas (sólo fueron de 25 euros, un 24% inferiores) de Navidad y Año Nuevo. Los ingresos han pasado de 341 millones a 1.470 millones en el tercer trimestre, por el aumento de pasajeros (de 8,1 millones a 31,1 millones) y la elección de embarque prioritario y asientos reservados. En el conjunto de los nueve primeros meses de su ejercicio (abril a diciembre), las pérdidas han descendido a 143,4 millones, en comparación con las de 731,3 millones de un año antes, y los ingresos han ascendido a 3.624,8 millones, frente a los de 1.517,4 millones que tenía hace un año. 

Ryanair estima que cerrará su año fiscal en marzo con unas pérdidas de entre 250 y 450 millones, y algo menos de 100 millones de pasajeros por la incertidumbre del Covid

Los costes de explotación han aumentado un 136%, hasta los 1.590 millones, en su tercer trimestre. Claro que al menos parece que no le afectará la subida del petróleo (el barril de Brent sigue su escalada y ya supera los 91 dólares por primera vez desde 2014): sus necesidades de combustible están “casi totalmente cubiertas para el cuarto trimestre del ejercicio 2022”, al 80% para el primer trimestre del año fiscal 2023 y al 70% para segundo trimestre. Eso sí, aunque haya destacado que tiene “uno de los balances más sólidos del sector” con casi 3.000 millones de efectivo y el 90% de la flota de Boeing 737 libre de cargas, su deuda neta ha aumentado a más de 2.000 millones con la crisis Covid y prevé reducirla a cero “lo antes posible en los próximos dos años”. Recuerden que en 2021, se ha mantenido líder en nuestro país (posición que ocupa desde 2011), con 23,3 millones de pasajeros. 

Ryanair ha señalado que las perspectivas para el resto de su ejercicio fiscal “son muy inciertas”, pues las reservas recientes han mejorado, pero habrá que estimularlas con precios a la baja. Es más, prevé que cerrará el ejercicio fiscal con unas pérdidas de entre 250 y 450 millones, y algo menos de 100 millones de pasajeros por la incertidumbre que genera el Covid. Eso sí, dentro de las low cost no es la única con números rojos: hace unos días se conoció que la británica easyJet ha perdido 255 millones entre octubre y diciembre, la mitad que hace un año; elevó sus ingresos a 965 millones, frente a los 197 millones obtenidos un año antes; y duplicó sus costes, hasta 1.220 millones. 

Posible compra de Air Europa por parte de Iberia: Michael O’Leary señala que “tendrán que ceder el 10% de los ‘slots’ si se fusionan” y Eddie Wilson desaconseja al Gobierno que invierta en Air Europa porque “es como invertir el dinero del contribuyente en el casino”

Paralelamente, desde Ryanair también se han pronunciado respecto a la posible compra de Air Europa por parte de Iberia (perteneciente al holding aéreo IAG), que ahora está suspendida: Michael O’Leary, CEO del grupo Ryanair, ha señalado que ambas “tendrán que ceder el 10% de los slots si se fusionan”, es decir, de las reservas de tiempo para despegue y aterrizaje, en una entrevista en Cinco Días; por su parte, el CEO de la low cost irlandesa, Eddie Wilson, ha desaconsejado que el Gobierno invierta en Air Europa, señalando que “es como invertir el dinero del contribuyente en el casino”, en una entrevista en Preferente.com.