Los resultados del primer semestre del año de Zúrich son malos. El beneficio neto fue de 1.000 millones de euros, un 42% inferior al de 2019, tras una caída de la facturación del 43%, hasta los 18.838 millones. El grupo asegurador suizo explicó en la nota difundida el jueves, que la causa principal fue la caída del 22,5% del beneficio del área de inversión, que no superó los 2.338 millones de euros.

Sea como fuere, lo cierto es que las primas y la comisiones tampoco obtuvieron un buen resultado, con un descenso del 1,5%, hasta los 16.261 millones de euros.

Los costes fueron los únicos que aumentaron. Los relacionados con los beneficios otorgados por los seguros lo hicieron un 2,9%, hasta los 11.556 millones de euros, y los relacionados con las pólizas subieron un 2,5%, hasta los 3.640 millones. Los gastos generales y de administración fueron muy similares a los de 2019 y alcanzaron los 3.256 millones.