• Jordi Gual sabe que la única manera de ser rentable es creciendo, cuanto más mejor.
  • El banco, que gana un 48% más, se ha convertido en un gestor de fondos: las comisiones aumentan un 11,6%.
  • Pero cuidado, porque existe el riesgo de que el mercado de renta fija implosione si Trump se empeña en bajar los impuestos de manera drástica.
  • El plan de ajuste y el saneamiento de la participación en la Sareb provocan un aumento de las provisiones del 51%.
Jordi Gual está satisfecho. El presidente de Caixabank es consciente de que la única manera de ser rentable es creciendo, y cuanto más mejor. Y como en este caso nadie les obliga con quién casarse o a quién adoptar, la compra del grupo luso BPI le ha sentado muy bien. Su integración en el mes de febrero le ha permitido mejorar sus resultados del primer trimestre hasta los 159 millones de euros, gracias a la aportación de BPI de 50 millones a los beneficios. En definitiva, Caixabank gana un total de 403 millones de euros en el primer trimestre, un aumento del 48% y supera así las previsiones del mercado. Mercado que no se entera de que las cosas han cambiado. Y todo ello en un proceso de reestructuración de BPI en curso y con unas cifras estimadas de 155 millones netos y 250 millones brutos. Lo comido por lo servido. Sin duda, la integración de dos millones de clientes provenientes del banco luso y 34.037 millones de recursos de clientes, y un total bruto de 23.328 millones de crédito, aporta un protagonismo a la cuenta de resultados y al patrimonio de Caixabank que le sienta muy bien en un escenario peninsular. Si ahora lo que importa es la Península, Caixabank manda. De su cuenta de resultados presentada este viernes puede evidenciarse un aumento de los ingresos, que evidentemente se apoya en la integración del banco portugués. No obstante, en datos comparables, el margen de intereses aumenta en un 6,3% (un 13,1% incorporando a BPI). Por su parte, las comisiones se elevan, sin considerar BPI, en un 11,6%, evidenciando que la forma de hacer banca ahora mismo es convertirla en una empresa de servicios, gestionando operaciones fuera de balance. Todo ello con el miedo de que algún día el mercado de renta fija implosione, algo previsible en el escenario actual, sobre todo si Donald, el presidente, se empeña en un recorte brutal de tributos. El margen de explotación se reduce en un 13,8%, hasta los 792 millones de euros, consecuencia de la menor generación de ingresos derivados de los activos financieros y de la cartera de participadas, cuya evolución refleja la venta del 2% de la participación de BPI en el banco angoleño, BFA. En el terreno de las provisiones destaca el importante aumento de las mismas en un 51%, consecuencia de cargos durante el periodo de 152 millones consecuencia del plan de ajuste, y de 154 millones al sanear su participación en Sareb. Todo ello en un escenario de mejora de las inversiones, que se refleja en un aumento del préstamo hipotecario del 11,5%, un incremento del crédito al consumo del 32% y una mejora sustancial en el préstamo a empresas del 46,9%. Algo interesante respecto al reflejo de un aumento del apalancamiento del sector privado, posible indicador de mejora de la actividad económica que poco a poco parece transmitirse al consumo, aunque no tenemos tan claro que a la riqueza las familias. De todas maneras, no debemos aplaudir mucho. El negocio del ladrillo ha restado 172 millones a la cuenta de resultados. Suben las ventas y los precios, pero los bancos siguen perdiendo, cada vez menos, pero pierden. No podemos terminar este análisis sin destacar el hecho de que los saldos dudosos han quedado fijados, a cierre de marzo, en 16.135 millones. Si consideramos que BPI aporta un total de 1.508 millones, llegamos a la conclusión de que ha habido una significativa reducción durante el periodo. Todo lo anterior deriva en un capital de máxima calidad del 11,5% y una rentabilidad del Grupo del 6,2%, una mejora de 0,65 puntos, mientras que el ROTE del negocio bancario y asegurador alcanza el 9%, un resultado de 557 millones. Rodrigo de Silos rodrigode@hispanidad.com