Jaime Caruana quiere sustituir a Carlos Torres en la Presidencia del BBVA. De hecho, cuando Francisco González (FG) le nombró consejero, en febrero de 2018, su nombre comenzó a sonar con fuerza como sucesor del ahora expresidente de la entidad. Al final, el elegido fue Carlos Torres.

Ahora Caruana se postula como sustituto de Torres, y cuenta para ello con el apoyo del PP. Los que no respaldan su candidatura son el PSOE, el PNV, José Ignacio Goirigolzarri… y el propio Carlos Torres, naturalmente.

El caso es que la ministra de Economía en funciones y próxima vicepresidenta económica del Gobierno PSOE-Podemos, Nadia Calviño, está advertida de que la mejor manera de finiquitar el saneamiento bancario español es mediante la fusión Bankia-BBVA, con Goiri como presidente. No por nada, sino porque es el preferido del PNV, que busca ‘recuperar’ el BBVA para la causa vasca y, además, sería un sueño hecho realidad para el actual presidente de Bankia. Todo esto sería imposible si en lugar de Torres, al frente del BBVA estuviera Caruana.

Sea como fuere, el ex gerente general del Banco de Pagos Internacionales (BIS), ya se ha postulado para sustituir a Torres, y lo ha hecho al tiempo que ha lanzado un órdago -viernes 15- a la política de tipos negativos del BCE. Es el primer banquero que se atreve a hacerlo con tanta contundencia.

En definitiva, se trata de un pulso entre Torres y Caruana, dos amigos de Manuel Pizarro. Y el dilema consiste en elegir entre su ‘ahijado’ Torres y su paisano turolense, Caruana

Evidentemente, Caruana está aprovechando la posición de debilidad que atraviesa Torres, que se ha quedado solo al apoyar a FG. Y conviene recordar que todo esto surge por el intento de Sacyr de hacerse con el BBVA, una operación abortada definitivamente por el entonces gobernador del Banco de España, un tal Jaime Caruana.

En definitiva, se trata de un pulso entre Torres y Caruana, dos amigos de Manuel Pizarro. Y el dilema consiste en elegir entre su ‘ahijado’ Torres y su paisano turolense, Caruana.

Mientras tanto, los directivos del BBVA cierran filas y los cuatro citados este martes como investigados por el juez Manuel García-Castellón, se han acogido a su derecho a no declarar. Hablamos de Juan Asúa, asesor del actual presidente, Carlos Torres, de Eduardo Arbizu, exresponsable legal de la entidad, de Manuel Castro, ex responsable de riesgos, y de Eduardo Ortega, director de los servicios jurídicos.

El miércoles será el turno del BBVA, imputado como persona jurídica y en cuyo nombre acudirá el responsable jurídico del banco en España, Adolfo Fraguas. Su comparecencia tiene una especial relevancia toda vez que el banco ha insistido por activa y por pasiva en su intención de colaborar con la justicia, algo que contrasta con el profundo malestar del juez con Torres: García-Castellón considera que no ha cumplido su promesa.