• La mecha podría ser la decisión del Santander de romper el acuerdo para la utilización de los cajeros del Popular.
  • González-Bueno ya lo advirtió: sería atentar contra la competencia.
  • Por lo demás, los resultados del ING tradicional recuperan el aliento.
  • Pero no es tan fácil reproducir el exitoso modelo español en otros mercados.
De los 3,6 millones de clientes que tiene ING en España -un 5,5% más que hace un año-, 1,9 millones tienen a la entidad como su banco principal, según los datos publicados este miércoles por la compañía. Sin duda, una de las causantes de este crecimiento ha sido la cuenta nómina, que han contratado cerca de 200.000 clientes desde junio de 2016. Más clientes suponen más créditos (aumentan un 14%), más depósitos y más fondos de inversión, planes de pensiones, etc. Si a esto unen el hecho de tener una tasa de morosidad del 0,88% se puede afirmar que estamos ante un modelo de éxito. Un modelo que nunca ha gustado a la banca tradicional, que siempre ha mirado a ING con recelo. De hecho, en breve podría estallar un nuevo enfrentamiento si el Santander decide romper el acuerdo para la utilización de los cajeros del Popular. Ya lo advirtió el consejero delegado de ING España y Portugal, César González-Bueno (en la imagen), para quien el acuerdo "ha producido unos ingresos muy importantes para Popular". Por eso, "si no le interesa, ya le interesará a otros y si no le interesa a otros, hablamos de prácticas anticompetitivas", señaló tras la compra, por un euro, del Popular. Hasta la fecha, en cualquier caso, el acuerdo ING-Popular continúa vigente en todos sus términos. Por lo demás, el grupo holandés ING recupera el aliento a pesar de ganar un 1,5% menos en el semestre debido a las inversiones destinadas a la transformación digital. De hecho, si tomamos como referencia el primer trimestre, el beneficio aumenta un 0,9%. Sin duda, el modelo a seguir es el español, pero no es tan sencillo. De momento, en Alemania, el banco ha lanzado 'Banking to go', una aplicación que facilita operaciones bancarias a través del móvil y, más importante aún, preludia el lanzamiento de una plataforma digital única. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com