Parece que el vicepresidente del gobierno se ha moderado... porque ya no dice estas cosas:

Aunque, por otra parte, y a juzgar por algunas de sus intervenciones -como la del domingo 16 durante una entrevista con Matías Prats en Antena 3- podría decirse aquello de quien tuvo, retuvo... por ejemplo. Puede que, ahora que está en el Gobierno Sánchez, presuma de prudente y hasta de humilde, pero a Pablo Iglesias le resulta imposible contener a su yo original -y predominante- ese Pablo, arrogante, bolivariano, misógino y heterocomunista. 

Pero la cuestión más grave es que cuando Matías Prats lanza la primera pregunta apuntando a que España es el país con más víctimas mortales por habitante del mundo -en la misma línea de Hispanidad- la respuesta de Iglesias es propia de la mafioso: Matías, "lo primero, prudencia". Sólo le faltó añadir aquello de, que parezca un accidente.