Ave Madrid Barcelona, tarde del miércoles. El viaje trascurre según lo previsto hasta que el convoy entra en tierras tarraconenses. Entonces, un servicial empleado de Renfe ofrece el siguiente aviso a los señores pasajeros: "Debido a los habituales robos de hilo de cobre en esta zona de Tarragona deberemos circular más despacio y es posible que no podamos cumplir con nuestro compromiso horario". ¡Jo, cómo está el patio! España tiene un problema moral. Esperamos que sea leve. Hispanidad redacción@hispanidad.com