Podemos se rasga las vestiduras porque SM Juan Carlos I saludó al príncipe saudí, Mohamed Bin Salman, cuando todo el mundo sospecha que fue el quien ordenó matar al periodista-asesor Khashoggi.

El Rey había acudido al Gran Premio de Abu Dhabi de fórmula 1 para la despedida de su amigo Fernando Alonso. Si se topó con Salman ¿Qué querían? ¿que no le saludara?

Y aún más hipócrita y cobardona resulta la actitud de Moncloa, que se quita de en medio asegurando que la agenda de Zarzuela no es de su competencia.

Hablamos del mismo Gobierno que fabrica corbetas para Arabia Saudí, para Bin Salman. Si decidieran paralizar el pedido, perderían las elecciones en Andalucía. ¡Ay que tener jeta!