El cantante y activista transgénero Iván González Ranedo, más conocido como Samantha Hudson, ha protagonizado polémicas por odiar a “las mujeres violadas” o con sus controvertidas canciones donde se burla abiertamente del Jesús o la Virgen María
Recientemente se ha conocido que Samanta Hudson es la nueva imagen de Doritos. Una publicidad que no le ha sentado bien a la marca de aperitivos de Pepsico, dado que se está enfrentando a una fuerte polémica en las redes. Como decimos, tras contratar al cantante y activista transgénero Iván González Ranedo, más conocido por su nombre artístico, Samantha Hudson, se han sucedido los comentarios.
¿CREIAN QUE HABIAMOS TOCADO FONDO? ¡NO SEÑOR! SACAMOS LAS PALAS Y CAVAMOS
— El Doctor Mabuse (@CSatori) March 3, 2024
La marca estadounidense Doritos contrata a Samantha Hudson para promocionar su producto, “influencer trans” que reconoció aquí, en Twitter, haber violado a su prima pequeña
Como ASCO, pero sin el “como” pic.twitter.com/wFgGGA7iO8
Y es que, Hudson ha protagonizado distintas polémicas de diversa índoles. Por ejemplo sus tweets del 2015 donde aseguró odiar a “las mujeres violadas” o sus controvertidas canciones donde se burla abiertamente del Jesucristo, el cristianismo, la virgen María y la Iglesia católica con letras obscenas que hacen alusión a sus preferencias sexuales.
Así las cosas, los usuarios en redes sociales, especialmente en España, no dudaron en llamar al boicot contra Doritos en particular y los productos de PepsiCo en general tras ver la colaboración con Hudson, en una reacción similar a la campaña del 2023 en redes contra la cerveza Bud Light tras lanzar una campaña con el influencer trans Dylan Mulvaney.
La polémica es tan grande ha llegado hasta EEUU donde influencers se están sumándose al boicot y cuestionando la decisión de PepsiCo de contratar a Samantha Hudson para su campaña “Crunch Talks”.
La solución es fácil: no compres Doritos. Y si insisten, bebe Coca-Cola.
Tampoco hay que olvidar que el Ministerio de Igualdad, entonces liderado por la insigne Irene Montero, gastó casi 20mil euros de los contribuyentes españoles en un acto donde premió Hudson en el marco de “la conmemoración del 28 de junio, Día del Orgullo LGTBI”.