Cristianos perseguidos en Europa
Comenzamos la crónica semanal sobre la persecución a los cristianos en Nigeria, donde Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) ya informó en su día de que los pastores fulani, un pueblo nómada mayoritariamente musulmán, que vive en el Sahel, se dedica a atacar a los cristianos.
En ese contexto, en lo que va de 2019, han sido asesinados dos sacerdotes en el Estado de Enugu y han secuestrado hasta nueve religiosos más. Afortunadamente, uno de ellos, el p. Malachy Asadu, sacerdote de la diócesis de Nsukka, en el estado de Enugu, fue liberado dos días después de su secuestro. La policía declaró que el sacerdote está en buenas condiciones de salud, informa Fides.
El P. Asadu fue secuestrado el 25 de noviembre a lo largo de la carretera Imilike-Nsukka Road cuando regresaba de una reunión diocesana en la Catedral de Santa Teresa, en Nsukka. Su secuestro tuvo lugar exactamente nueve días después de que fuese secuestrado otro sacerdote, el p. Teófilo Ndulue, que desapareció el 16 de noviembre y fue liberado tres días después.
El sacerdote, párroco de la iglesia de Santiago el mayor en Ugbawka, falleció por los disparos de arma de fuego de los ‘pastores Fulani’
El clero de la diócesis de Enugu había salido a las calles para exigir más seguridad después del asesinato del p. Paul Offu asesinado en la tarde del jueves 1 de agosto. El sacerdote, párroco de la iglesia de Santiago el mayor en Ugbawka, falleció por los disparos de arma de fuego de los ‘pastores Fulani’ mientras conducía el automóvil por la carretera Ihe-Agbudu Road hacia Awgu.
Entre los últimos casos recordamos el del p. Arinze Madu, vicerrector del seminario ‘Reina de los Apóstoles’ en Imezi-Owa, estado de Enugu, secuestrado el 28 de octubre y liberado el 30 de octubre.
Lamentablemente, los secuestros no siempre concluyen con la liberación del rehén. El 20 de marzo, encontraron el cuerpo sin vida de don Clement Rapuluchukwu Ugwu, párroco de la iglesia de San Marco, en Obinofia Ndiuno, en la Ezeagu Local Government Area, en el estado de Enugu. El parroco había sido secuestrado el 13 de marzo. En esa ocasión, Mons. Callistus Onaga, Obispo de Enugu, expresó su pesar por el hecho de que la policía no pudiese salvar al padre Ugwu a pesar de que le habían asegurado que estaban siguiendo a los secuestradores, mientras que estos últimos, por el contrario, continuaban sacando dinero de la cuenta del sacerdote con la tarjeta del cajero automático.
Pero si en África hay persecución a los cristianos, en Europa también, en forma muchas veces de discriminación. El Observatorio de intolerancia y discriminación contra los cristianos en Europa dio a conocer el informe de 2019 que concluye que en al menos 17 países del viejo continente los fieles han sufrido algún tipo de discriminación, recoge Aciprensa.
El informe señala que los cristianos han sufrido algún tipo de discriminación en Austria, Bélgica, Bulgaria, República Checa, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Irlanda, Italia, Holanda, Polonia, Eslovenia, España, Suecia, Suiza, Reino Unido y en instituciones europeas
Entre los casos más llamativos están las investigaciones penales iniciadas contra al menos seis obispos y sacerdotes en España, por haber criticado la ideología de género que es fundamento de la ‘Ley de protección integral con la LGBTfobia y la discriminación por razones de orientación e identidad sexual’.
Otros casos que aparecen en el informe son el de las obstetras suecas Ellinor Grimmark y Linda Steen, a quienes se les impidió trabajar en el hospital donde trabajaban tras haber rechazado participar en un aborto; la investigación realizada en Francia contra Bruno Pichon, un farmacéutico que se negó a vender un anticonceptivo, o el de la nueva ley del aborto en Irlanda que obliga a los médicos objetores de conciencia a enviar a las pacientes con un médico que sí está dispuesto a realizar el aborto.
La discriminación en Europa también afecta a los conversos. En Suecia, el 68% de los afganos convertidos del islam al cristianismo sufrieron el rechazo a su pedido de asilo en razón de su conversión.
Desde el año 2005 el Observatorio ha denunciado más de 2.600 casos de intolerancia y discriminación contra los cristianos en Europa
En Alemania hubo al menos 30 casos en los que distintas universidades prohibieron acreditarse y participar en los consejos universitarios a los grupos cristianos.
El informe también se refiere a los muchos ataques contra iglesias en Francia, como una que fue incendiada en Grenoble, o el ataque a la iglesia de Nuestra Señora de los Infantes en Nimes, o el incendio en la iglesia de Equilen Plage.
La tarea del Observatorio, que tuvo a cargo este informe, es analizar la situación de los cristianos en Europa “no para comparar o disminuir la persecución que sufren en otras partes del mundo, sino para estar vigilantes en la protección de los derechos humanos”.
Desde el año 2005 el Observatorio ha denunciado más de 2.600 casos de intolerancia y discriminación contra los cristianos en Europa.