La Federación Internacional de EE.UU., FINA restringirá la categoría femenina a partir de ahora a aquellas deportistas que hayan sido declaradas legalmente como mujeres y que hayan concluido su tratamiento de reasignación de género antes de los 12 años, es decir, sin haber experimentado ninguna parte de la pubertad masculina.

«Tenemos que proteger los derechos de nuestros atletas para competir, pero también tenemos que proteger la equidad competitiva en nuestros eventos, especialmente la categoría femenina», dijo tras el Congreso, celebrado en Budapest, Husain Al-Musallam, presidente de la FINA. «La FINA siempre dará la bienvenida a todos los atletas. La creación de una categoría abierta significará que todo el mundo tiene la oportunidad de competir en un nivel de élite. Esto no se ha hecho antes, por lo que FINA deberá liderar el camino. Quiero que todos los atletas se sientan incluidos para poder desarrollar ideas durante este proceso».

Esto sucede tras distintas polémicas surgidas en pruebas en las que competían deportistas femeninas frente a deportistas transgéneros. Después de que se tratara de igualar a los desiguales, como en el caso de la nadadora Lia Thomas, en atletismo Craig Telfer, Laurel Hubbard o la boxeadora Fallon Fox, quien se convirtió en la primera luchadora transgénero de la MMA, llegando a romper el cráneo, en septiembre de 2014, a su rival, Tamikka Brents, en menos de 5 minutos.