La batalla de Vox contra el adoctrinamiento en las aulas: presenta proposiciones en 14 regiones para que se retiren "los libros de texto con cualquier tipo de adoctrinamiento"
Vox ha registrado una Proposición No de Ley para poner fin al adoctrinamiento ideológico sobre los menores en las aulas. El partido de Abascal pretende así garantizar el derecho que tienen todos los padres para educar a sus hijos, respetando el artículo 27 de la Constitución; poner fin de forma inmediata, a través de la actuación de la Alta Inspección Educativa, cualquier intento de adoctrinamiento ideológico sobre los menores; prohibir los contenidos y materiales educativos que puedan afectar a la inocencia de los menores; y promover las modificaciones legislativas necesarias para remover los obstáculos que impidan el acceso a la Educación de todos los españoles en igualdad de condiciones.
En definitiva, “los padres deben permitir autorizar que sus hijos reciban esta u otra formación, igual que lo hacen con absoluta naturalidad para permitir que acudan a una excursión con el colegio”, ha explicado el secretario general de la formación, Ignacio Garriga.
Se trata de acabar con contenidos como este en el que definen el discurso de Vox como "ultranacionalista, xenófobo, autoritario y populista" mientras destacan que, "a pesar de sus grandes diferencias ideológicas" Podemos y Ciudadanos tenían en común "la juventud de sus principales dirigentes" y el "afán de regeneración de la vida política del país, unidos a una imagen y un discurso de nuevo estilo"... que en el caso de Ciudadanos, con su desaparición, es ya cosa del pasado.
No en vano, el de Abascal es el único partido que apuesta por el bono escolar que consiste en que el Gobierno entregue a los padres un cheque que cubra el coste total de los colegios de sus hijos... en el centro que los padres elijan, sea público o privado.
Dándoles el poder de elegir la educación de sus hijos, con eso sí que se cumple el derecho a la libertad de enseñanza, que es propiedad de los padres, no del Gobierno, ni de los empresarios. Dicho de otra forma, el bono escolar no es de derechas ni de izquierdas, no es socialista ni capitalista, tampoco liberal: es partidario de la familia, esa célula de resistencia a la opresión, sea la opresión del capital o del Estado.
