Sumándose  a la moda de las historias románticas donde rebosa la mermelada por todos los lados  llega esta flojísima película española donde los enamorados protagonistas se pasan deshojando la margarita todo el metraje.

Por un puñado de besos cuenta con  los mismos ingredientes que los relatos del italiano Federico Moccia: un reparto plagado de jóvenes con "cuerpos danone", una historia de amor llena de dificultades, amigos confidentes (a los que los protagonistas hacen partícipes de todas sus "cuitas") y una frivolización total de las relaciones sexuales…

Sol es  una joven que quiere rehacer su vida sentimental tras el duro golpe que le ha dado la vida. Por ello decide escribir un anuncio donde declara su drama: es seropositiva. A su reclamo responde Dani, un atractivo joven que esconde un gran secreto. Tras su primera cita ambos se enamoran, pero las mentiras de Dani pueden destrozar ese comienzo…

Rodada con la calidad de  una telemovie casera y con unos diálogos que parecen escritos por un quinceañero, el gancho de esta película (basada en una novela de Jordi Sierra y Fabra) reside en los actores protagonistas: los televisivos Ana de Armas y Martiño Rivas. La primera luciendo su fina lencería gran parte de la película y el segundo mostrando sus bíceps de gimnasio…

Está muy bien intentar hacer taquilla con productos comerciales pero, por favor, que tengan algo más de calidad…

Para: Las jovencitas romanticonas que no tengan ningún criterio, ni siquiera cinematográfico