Los fundamentalistas no toleran los matrimonios interreligiosos incluso si son perfectamente legales Una pareja de jóvenes de Lahore (Pakistán), el cristiano Amin y la chica musulmana Sadia, ambos estudiantes universitarios, han sido secuestrados en Karachi por un grupo de extremistas islámicos que tienen la intención de oponerse por todos los medios a su matrimonio. Los dos se han casado por el rito musulmán (el chico se convirtió al Islam) el pasado mes de junio, pero incluso así la familia de Sadia y los grupos de musulmanes radicales se han opuesto violentamente a la boda. Los extremistas irrumpieron en la casa de la prima de Amin, en Karachi, donde los dos se habían refugiado, secuestrándolos.

Lo ha confirmado a la Agencia Fides el Abogado cristiano Sardar Mushtaq Gill, contactado para resolver el caso y prestar asistencia legal. Según el Abogado, algunos oficiales de la policía están involucrados en el caso y han apoyado la acción ilegal y violenta.

Inmediatamente después de la boda, los extremistas presentaron una denuncia contra el muchacho. La policía también arrestó a los miembros de la familia de Amin, acusándolos de matrimonio forzado, aunque Sadia dice que se casó según su libre voluntad y consentimiento. Amenazados, los dos jóvenes huyeron de Lahore, refugiándose en Karachi. Ahora, incluso la pareja que los acogió (primos de Amin) se han visto amenazados y hostigados.

"Chicas cristianas e hindúes son secuestradas y convertidas al Islam con frecuencia, destinadas a bodas islámicas por la fuerza. Pero cuando una chica musulmana quiere casarse con un cristiano, se produce un levantamiento que puede llegar a formas extremas de violencia -dice Gill- aunque formalmente el muchacho se convirtió al Islam". "El fundamentalismo religioso es una grave amenaza a la libertad religiosa en Pakistán: los extremistas no toleran los matrimonios interreligiosos -especifica Gill- incluso si son perfectamente legales".

José Ángel Gutiérrez
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