Apostilla para los franceses: queremos empresas en mercados liberalizados. Las operaciones hostiles en el sector energético no tienen éxito. Iberdrola absorbe a Scottish… y se hace aún más atractiva para los paquidermos europeos. El Síndrome Metrovacesa: Galán advierte que podría reforzar, en lugar de anular, los blindajes de Iberdrola. El espíritu políticamente correcto del presidente de Iberdrola: ¡Que vivan las mujeres y las renovables!
La Junta General de Accionistas de Iberdrola, reunida en Bilbao, aprueba este jueves 29 la mayor ampliación de capital de su historia: 8.625 millones de euros. Cuando finalmente se produzca la absorción de Scottish, estaremos ante una compañía con una potencia de 39.000 MW, 21,7 millones de clientes entre Europa y América, y líder mundial en energías renovables (16.500 MW). En principio, hablamos de un Grupo con una capitalización que rozará los 50.000 millones de euros, o 65.000 millones, si ustedes prefieren atenerse al llamado "valor de empresa", que suma epígrafes de deuda y que, cuando menos, es un concepto contable un tanto polémico. En cualquier caso, 50 millardos es una cifra muy respetable.
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, resume la nueva Iberdrola-Scottish como la empresa eléctrica del Eje Atlántico (España, Reino Unido, Estados Unidos, México… y Brasil), en contraposición, quizás, a una Endesa que es la empresa eléctrica líder en Iberoamericana. Dos empresas tocadas por la misma maldición, dentro del proceso de concentración europea: ambas son más solventes y rentables que sus pares europeos, sólo que más pequeñas en tamaño.
Y todo lo que presume el actual presidente de Iberdrola es cierto –bueno, salvo el apartado de lo políticamente correcto al que luego nos referiremos-. Galán ha convertido a Iberdrola en la eléctrica más rentable, no ya de España, sino de toda Europa. El segundo acierto ha sido la fortaleza inversora, el aumento de la capacidad de generación, clave del sector en todo el mundo. No sólo eso, sino que, en lugar de quedarse en su predio nacional, ha adoptado una actitud de depredador, en lugar de depredado. Ha decidido salir al exterior y comprar. E incluso, no hay que ocultarlo, ha comprado una empresa como Scottish que, no nos engañemos, es una buena empresa pero está muy cara. Cara incluso considerando que Galán ha aprovechado el subidón de Iberdrola provocado por la entrada de ACS para negociar con Scottish.
Hasta ahí todo bien, pero el problema de Galán no está ni en la gestión ni en el exterior sino en el interior, y más en concreto en su composición accionarial.
Veamos. Con Scottish, Iberdrola ha pasado de un 4 a un 6% en el sector eléctrico de la Unión Europea. Eso significa, por de pronto, que resulta mucho más apetecible que antes. Como informara Hispanidad, EDF ya ha puesto en su punto de mira a la empresa española. La francesa es más del doble que la suma de Scottish e IB, amén de la primera potencia nuclear del mundo y un monopolio estatal en Francia, casi un departamento del Gobierno francés. Ahora, Iberdrola es mucho más apetitosa que antes, para ella y para todos los paquidermos europeos.
Ahora bien, cuando un periodista pregunta a Galán por el posible interés de EDF y Repsol YPF en Iberdrola, la repuesta es doble. Por una parte, asegura no haberse entrevistado con Antonio Brufau –presidente de Repsol YPF- desde "hace meses" ni haberlo hecho con los directivos del EDF. Por supuesto, a Brufau no le ve desde que, tras haber negociado, ya en agosto del pasado año, una fusión Iberdrola-Gas Natural, donde se incluía Fenosa, se fue a verle para comunicarle que se lanzaba a por Scottish, lanzamiento jaleado por la entrada del peligroso Florentino Pérez en la capital de Iberdrola. La respuesta de Brufau –por eso no se han vuelto a ver- fue desabrida: "Eres muy libre de hacer lo que quieras, Ignacio, pero esto anula cualquier proyecto con Gas Natural".
Y ojo, porque en La Caixa han aprendido que no se puede ser el primero. Han aprendido que lo ideal sería que la pública EDF se lanzara a por Iberdrola y que Repsol YPF, no GN, se lanzara en su defensa, entre el aplauso de las masas y la gratitud eterna del Ejecutivo. Y así, en efecto, se constituiría una empresa energética de matriz española y con capacidad de competir en le mundo. Ahora, en vísperas de elecciones generales en Francia, estamos en el estadio en que EDF revisa a fondo a Iberdrola y ya ha echado manos de los conseguidores en nuestro país. Por supuesto, no financieros, que ese no es el problema, sino de información e imagen. Una de esas maniobras de aproximación tan sutiles… que incluso pueden negarse en público sin mentir.
Pero, en el entretanto, Galán lo tiene claro: "Iberdrola tiene un proyecto propio". Y más: "Valemos lo que valemos por ese proyecto, no porque nadie nos esté comprando… No estamos en liquidación". Niega conversaciones con EDF –por supuesto- y… "hace meses que no veo a Antonio… Estamos abiertos a hablar con todos, pero no hay ningún proyecto actualmente".
No sólo eso: "Lo que he descubierto es que en este sector las operaciones hostiles nunca tienen éxito, e incluso el que inicia la batalla no suele ser el que la termina". Y para EDF, una apostilla: "buscamos empresas en sectores liberalizados". Es decir, que EDF tendría que entrar en Iberdrola con una OPA hostil.
Asunto Florentino: "Iberdrola no está en contra de ACS, pero existe una ley que está para proteger a los consumidores y para evitar concertaciones cuando un mismo accionista esté en dos empresas. En defensa de los intereses de los consumidores y para evitar concertación entre Iberdrola y Fenosa… exigimos que la ley se cumpla".
Naturalmente, lo anterior es una de esas mentiras que todo poderoso parece obligado a decir. Sí, Galán no quiere a ACS porque conoce la ambición sin límites de Florentino Pérez, que lo único que quiere es mandar. Y eso que el Gobierno Zapatero le ha dicho al ex presidente del Real Madrid que no le gusta la fusión Iberdrola-Fenosa. Y eso que Fenosa ya consolida en ACS, Y eso que… pero Galán no se fía. Y hace bien.
El presidente de Iberdrola es un gran gestor pero políticamente correcto. Por eso canta las excelencias de las mujeres y de las energías renovables, no sabríamos decir por qué orden. Blasona de que el número de directivas ha aumentado en Iberdrola desde que ocupa la Presidencia, y anima a "las" periodistas a tomar la palabra (el sustantivo periodista, resulta que el género no marcado es el femenino, miren por dónde). Al tiempo, sin inmutarse, advierte que la energía eólica ha beneficiado este invierno ventoso a los consumidores, con una bajada de precios. No hombre, no: esas cuentas están hechas a partir de las subvenciones oficiales recibidas, las que encarecen la tarifa. Y no olvidemos que los consumidores de hoy son los contribuyentes de hoy y los que pagarán la tarifa mañana. La eólica no abarata la tarifa de la luz, sino que la encarece de forma salvaje… en inviernos ventosos o en inviernos calmos.
Como diría el presidente de E.ON, Wulf Bernotat, no se trata de producir energía eólica "donde sopla el viento, no donde soplan las subvenciones".
En su afán ecologista, incluso alaba a los pinchauvas de Greenpeace, que la han cogido con la central de Pasajes, y no se permite crítica alguna a la desastrosa gestión del Gobierno Zapatero, que pretende acabar con la única esperanza energética del mundo en el momento presente: la energía nuclear.
Y los blindajes. Galán afirma que los mantiene en defensa del pequeño accionista. Cree en los blindajes más que en los núcleos duros: "Nadie, ningún accionista, entra en un sitio de por vida. Cuando no gana dinero se va". Y eso sí: Galán advierte que le dan ganas, no sólo de mantener los blindajes actuales, sino de aumentarlos. Veamos, ahora mismo, en Iberdrola el blindaje consiste en que ningún accionista puede tener más del 10% de los votos, salvo que lance un OPA –o alcance- el 66% del capital –si lo hace en efectivo- o el 75%, si utiliza intercambio de cromos.
Como ejemplo, cita Metrovacesa, donde "los pequeños accionistas" pensaban que sus títulos valían 120 y de repente valían 80. Pero ojo, no se estaba refiriendo sólo a Joaquín del Rivero y Ramón Sanahuja (el reconocido santo patrón de las costureras), sino también a los Entrecanales y a Florentino Pérez en Fenosa, y demás fautores de opas parciales.
