Exige medidas para salir de la inadmisible situación económica de España pero no señala cuáles

 

ZP está generando una verdadera aversión al presidente del BBVA.
Al presidente del BBVA, Francisco González, se le conocen pocos amigos, fiel a un principio vital de que no necesita amigos. Entre ellos, César Alierta, Manuel Pizarro y poco más. Curiosamente es menos amigo de quien le nombró presidente de Argentaria, Rodrigo Rato, al que se negó a integrar en el BBVA tras el regreso a España desde Washington (FMI).

Pero, desde luego, entre esos amigos no se cuenta el presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero. Sobre todo después de la reunión de las 37 grandes empresas españolas en Moncloa, en noviembre último. En primer lugar, FG se negó a acudir. Luego el gobernador del Banco de España, Fernández Ordóñez, le obligó. Pues bien, nada más llegar fue el más duro con Zapatero y su política económica, provocando el cabreo mayúsculo del presidente, que desde entonces se ha dedicado a ponerle como no digan dueñas en sus contactos como empresarios.

Y así llegamos a la Junta de Accionistas del BBVA, celebrada en Bilbao en la mañana del viernes. Y ahí FG se ha explayado a gusto. Ha exigido reformas en profundidad para una economía española que considera atraviesa una situación insostenible. Eso sí, no precisó las reformas necesarias, ni la intensidad de las mismas, para salir de la crisis.

Lo que está claro es que FG se ha convertido en el Pepito Grillo de ZP.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com