Aunque tengo serias dudas sobre el encaje jurídico de esta respuesta dentro de la normativa sobre derecho a la rectificación, dado que se trata de la respuesta a un artículo de opinión, no a una información, procedemos a publicar el envío de Jaime Ignacio del Burgo. Según esa misma normativa, le responderemos en nuestra próxima edición… "a propósito de verdades".

Apreciado Eulogio:

Un buen amigo me ha enviado el artículo que firmas en HISPANIDAD con el título "¿DONDE SE SITUARA DEL BURGO EN LA MANIFESTACION DEL PROXIMO SABADO?"

Haces un relato de cómo y por qué surgió la disposición transitoria cuarta de la Constitución. Y nada de lo que cuentas es verdad. Nunca fui llamado a capítulo por Adolfo Suárez con la advertencia de que si no aceptaba la disposición transitoria cuarta mi carrera política podía acabar de concejal del Ayuntamiento de Pamplona. Tampoco es cierto que la citada disposición fuera una concesión de Suárez a Garaicoechea. Lo único cierto es que dicha disposición fue consecuencia de la resistencia de la UCD foral -firmemente apoyada por Suárez- a aceptar que Navarra fuera integrada por la brava en Euzkadi garantizando que sólo el pueblo navarro tenía derecho a decidir si quería hacerlo o no. La transitoria es la plasmación constitucional del acuerdo unánime adoptado por todos los diputados y senadores por Navarra en la reunión celebrada en el Congreso los días 29 y 30 de diciembre de 1977 en el que el PSOE y el PNV acabaron por aceptar que sólo el referéndum del pueblo navarro podría legitimar un cambio del estatus de Navarra.

Por cierto que en el Congreso de los Diputados la defensa de la disposición transitoria cuarta, en nombre de UCD, corrió a cargo de Jesús Aizpún. Es verdad que más tarde se abstendría en la votación de conjunto de la Carta Magna después de haber reflexionado más a fondo sobre el asunto y llegar a la conclusión de que después de la Constitución ya no habría fueros y además la transitoria cuarta nos abocaba indefectiblemente a Euzkadi. Respeté la decisión de Aizpún aunque discrepé de ella. Poco después volveríamos a coincidir plenamente en la defensa de Navarra. Aizpún acertó al crear Unión del Pueblo Navarro, pero también es justo reconocer que sus temores, por fortuna, no se cumplieron pues Navarra, después de treinta años de régimen constitucional no es Euzkadi, y nuestro Fuero goza de excelente salud.

Bajo el mandato de Adolfo Suárez, se impulsó una Constitución que por vez primera en la historia constitucional española reconocía de manera rotunda e inequívoca los derechos históricos y el régimen foral de Navarra. La transitoria cuarta, a su vez, respetó el derecho del pueblo navarro a decidir libremente su destino en el seno del nuevo Estado autonómico español. Por último, y gracias a Adolfo Suárez, conseguimos democratizar nuestras instituciones y el Amejoramiento del Fuero.

En la Constitución de la II República los prohombres de aquel entonces nada dijeron sobre Navarra y le fue de aplicación el procedimiento común de creación de regiones autónomas. En 1932 a punto estuvo Navarra de ser integrada en Euzkadi por decisión de los ayuntamientos y en vísperas de la guerra civil, los socialistas acordaron poner de nuevo en marcha el mecanismo constitucional de integración en Euzkadi. Esto hoy no sería posible y además sin la transitoria cuarta a Zapatero tendría mucho más fácil el camino para la entrega de Navarra. 

Durante mi ya larga trayectoria política he combatido con ahínco tanto el terrorismo de ETA como el nacionalismo vasco. Estoy orgulloso de toda esa trayectoria, especialmente de haber sido el "autor intelectual" e impulsor del Amejoramiento del Fuero, que hoy es asumido por la gran mayoría de las fuerzas políticas democráticas de nuestro viejo Reino. También creo haber prestado un importante servicio a Navarra al dedicar buena parte de mi vida a la formulación de la moderna doctrina fuerista y a la investigación y difusión de nuestro Derecho Foral Público.

El pueblo navarro -buena parte de él, para ser más exactos- me ha otorgado su confianza casi ininterrumpidamente desde 1977. Jamás la he traicionado.

Así que en la manifestación del sábado próximo estaré entre ese pueblo llano de nuestra tierra que valora cuanto he hecho por defender que Navarra siga siendo Navarra y, por tanto, España.

Cordialmente,

Jaime Ignacio del Burgo