En la SER se hablaba de inmigración. Un tertuliano apuntaba que está mal visto que el gobierno de Senegal ponga límites a sus ciudadanos para venir. Les facilitan la salida del agente y además es que se han convertido en la principal fuente de riqueza. Estos días están expatriando centenares de ciudadanos senegaleses. Los están volviendo a llevar a sus países. No se está dando publicidad, pero está ocurriendo.
Carlos Elordi señalaba que mi impresión es que la sociedad británica es multirracial, con muchos problemas, hay problemas vinculados a la condición de clase, pero la realidad británica es multirracial. Yo no digo que sea un proyecto o modelo a asumir, pero la sensación que uno tiene de Gran Bretaña es lograda. Para mí un modelo de integración que ha fracasado es el francés. Porque no tiene equivalente en Gran Bretaña.
El tertuliano Matías destacaba que el 25% de los musulmanes apoyaba los atentados que habían realizado un año antes. Y la propia prensa británica reconoció que el modelo de integración ha fracasado. Pero qué es estar integrado. Casi se les exige más integración que a los habitantes del país. Un extremo es la fortaleza, lo que hace EEUU con México, y el otro lo inevitable.
Y otro tertuliano opinaba que deberíamos estableces cuáles son esas normas de integración, los inmigrantes que llegan a un país deben respetar las leyes del país aunque no les gusten, y las no escritas y nuestra forma de ser también. Y nosotros también les tenemos que respetar su derecho a la diferencia, su cultura, etc. Esto hay que hacerlo ya concretamente, porque si no, tendremos problemas como en Francia.
