El Foro Español de la Familia (FEF) -que promueve la iniciativa legislativa popular en favor de la adopción de niños por parejas heterosexuales- solicitó a la Mesa del Congreso una prórroga hace dos meses. La Mesa acaba de pronunciarse: podrán disfrutar de tres meses más para alcanzar las 500.000 firmas mínimas exigidas por la Ley.
Según fuentes del FEF, la petición de prórroga no se produjo por miedo a no alcanzar las 500.000 firmas exigidas legalmente para la tramitación parlamentaria, sino porque el Foro aspira a presentarse ante el Congreso con mayor respaldo social. Por otra parte, la petición de prórroga de las iniciativas legislativas populares es bastante habitual debido a las dificultades técnicas y logísticas para lograr la recopilación de las 500.000 firmas en los pliegos oportunos, por los fedatarios registrados, etc. Además, en una sociedad desvertebrada como la española, recolectar 500.000 firmas no es una tarea sencilla.
Por eso la Mesa del Congreso ha concedido siempre las prórrogas que han sido solicitadas. En este caso además, los seis meses legales han sido partidos por los paréntesis navideños y de Semana Santa. A pesar de todo, el colectivo homosexual está que trina. El presidente de la Fundación Triángulo, Miguel Ángel Sánchez Rodríguez, critica la concesión de la prórroga y aprovecha para arremeter contra el FEF al que critica de "derecha católica marginal en la realidad social española".
La realidad de la calle es que el 80% de las personas a las que se les propone firmar para garantizar que los niños sean educados por un padre y una madre, no sólo firman, sino que firman con entusiasmo. Si el FEF no se persona en el Congreso con varios millones de firmas es exclusivamente por las dificultades logísticas a las que antes hemos hecho referencia. Y esto es así, aunque a Triángulo no le guste. Salvo en Chueca, claro.
