La misma subida de los precios del petróleo que perjudica a las aerolíneas beneficia a las petroleras. Entre ellas, Repsol, cuyo beneficio en los nueve primeros meses del año aumentó un 6,4% con respecto al mismo período del ejercicio anterior hasta 1.901 millones de euros. Buen resultado a pesar de que el último trimestre se cerró con una caída del 14,5%.
La clave, según Repsol, ser encuentra en la mejora de los precios de petróleo y gas, que coincide con la recuperación del negocio químico y los "excelentes" resultados de la división de gas natural licuado (GNL). El calificativo "excelentes" está suficientemente justificado si tenemos en cuenta que el resultado de explotación esta división creció un 367,8%, por los mayores márgenes de comercialización y el crecimiento de las ventas tras la puesta en marcha de Perú LNG.
El resultado de explotación de todo el grupo se situó en 4.102 millones de euros, un 1% superior al obtenido hasta septiembre de 2010, mientras que su resultado neto recurrente se situó en 1.829 millones de euros, un 4,5% más.
Mariano Tomás
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